Ardientes Musas que me inspiran.
Fecha: 04/10/2017,
Categorías:
Incesto
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... mi polla era estrujada por esa maravillosa cueva estrecha, apretada y virgen. Era grandioso, estaba follando a mi propia hermana, ahora era mi mujer por completo. Ella por su parte, se hizo hacia atrás para que la penetración se hiciera aún más profunda. Me senté y busqué sus labios, la introduje mi lengua y succioné la suya, me tragaba su saliva y ella la mía. No sé si estábamos en el cielo o en el infierno, pero gozábamos el uno al otro. Entonces la giré, abrí sus piernas y la penetré salvajemente, de un solo tirón, ella aguantó el golpe y comencé el mete y saca mucho más rápido y fuerte. Ella resistía los embates de mi duro cipote jadeando igual que yo. Chupaba sus tetas, sus labios, mordía sus orejas, su cuello… agarraba brutalmente su culo y seguí haciéndola mía insertando mi falo endurecido a más no poder dentro de su tierno estuche recién estrenado. Estábamos sudando de tanta acción física empujándola sin cesar hundiéndola en el colchón de viscoelástica que no sonaba como los de muelles, gracias a ello pudimos gozar salvajemente de una follada tremenda que ambos deseábamos con pasión. Ella me abrazaba y yo la besaba en todos los lugares que mi boca alcanzaba, me la comía sin dejar de perforar su gruta uterina. No pude aguantar más de diez minutos calzándomela cuando comencé a sentir una sensación electrificante que me recorrió todo el cuerpo, culminando en una gran corrida en su fondo vaginal, muy dentro de ella. La clavé hasta los huevos, percibiendo inundar su ...
... interior con mi esperma chorro a chorro… era impresionante como notaba la presión en mi glande rellenándola. Le dije que al fin era mi mujer y yo su hombre…,
-“el macho que ella necesitaba” me añadió.
Nos besamos exhaustos y contentos, habíamos conseguido hacerlo después de varios intentos frustrados. Me sentía afortunado de haber desflorado a aquella niña virgen de delicadas formas físicas y anímicas… de haber sido el pionero en gozar de la estrecha, limpia y hermosa vagina de mi amada hermana. Poco después ella se sentó y sintió salir líquido espeso de su vagina, era semen con algo de sangre de la rotura del himen, la abracé. Se dio un baño y volvió más tranquila para quedarnos relajados hasta dormirnos cada uno en su cama. Esta fue la primera vez que hicimos el amor mi hermana y yo.
Después de esto seguirían más sesiones amatorias a expensas de nuestros padres, aunque con el tiempo supe que mi madre estaba al tanto de mis fechorías con la pequeña de la casa, hasta que un día se echó novio formal y con solo 20 años… a los dos meses se casaron. La boda fue algo repentino e inesperado, extraño si no fuera porque se hallaba preñada de mi sobrina Jesica. Yo también me puse a trabajar después de acabar la carrera y nuestras vidas de separaron temporalmente…. Al cabo de los años nos juntamos en unas vacaciones con nuestras parejas y los dos niños que tenía entonces, yo solo uno, quizás fue el principal motivo de mi divorcio. Durante varios años repetimos pasar juntos las ...