1. El tío Juan


    Fecha: 03/08/2020, Categorías: Gays Autor: ChicaSexy3, Fuente: CuentoRelatos

    ... mí… no importa si en mi vagina o en mi culo… donde él quisiera entraría.
    
    Estaba duro, caliente… tremendo vergón erecto frente a mis ojos… y yo con mis 21 añitos abrí mi boca para meterme ese pedazote de carne caliente y palpitante. Aunque sabía a orines y semen, no me importó… lo recorrí con mi lengua, rodeé su cabeza con ella…
    
    —Niña, chupas como si mi pene fuera un bombón bum.
    
    Tan grande era que, con mi mano en su base, aun así, me estaba atragantando. No recordaba que fuese tan gruesa y larga…
    
    Quise sentirla entre mis tetas… la saqué de mi boca, escupí sobre ella ese mar de saliva que me había generado su tamaño y comencé a pajearla con mis senos.
    
    Juan se tiró un poco hacia atrás, apoyándose sobre sus codos. Ni siquiera habíamos subido a la cama, solo estábamos en la orilla, pero ya era todo un espectáculo.
    
    Decidimos llevar la acción a la cama. Entonces él terminó de desnudarse y me tiró sobre la cama… separó mis piernas y metió su boca y nariz entre los labios de mi vagina… yo me abría al máximo mientras levantaba mis caderas hacia el cielo para dejarle más expuesto mi sexo. Juan puso una de las almohadas debajo de mi cuerpo, eso me dejó en la posición justa.
    
    Yo quise tenerlo ya mismo… no quería esperar más… entonces le reclamé ese pedazo de carne en mi vagina.
    
    —Espera que me pongo el condón.
    
    —Nooo, sin condón… quiero que te vengas dentro de mí, todas las veces que quieras.
    
    Eso parece ser una palabra mágica para cualquier hombre… jajaja ...
    ... literalmente se arrojó sobre mí y su verga abrió un hueco enorme en mi sexo… parecía que no iba a terminar nunca de entrar toda… yo ya estaba sintiendo dolor y él seguía entrando en mí. Sentí su cabezota chocar contra el fondo de mi vagina y Juan seguía empujando hacia adentro. Quizás algo se rasgó dentro de mí porque en un momento él dio un empujón más fuerte y sentí sus testículos chocar contra mi piel… había entrado toda.
    
    ¡La volvió a sacar hasta la mitad y se fue hasta el fondo otra vez!!
    
    Dolía, me dolía, y yo gemía de dolor y de placer… no que yo estuviera sintiendo placer por el dolor, sino porque veía su rostro de placer y eso me excitaba más… me poseía, yo era suya por el tiempo que él quisiera…
    
    Sentía sus bolas chocar con los labios de mi vagina y de repente caí en la cuenta que ya no me dolía… pero él no había acabado su mete y saca, mejor dicho… su penetración profunda y sacarla hasta casi la mitad… y vuelta a meterla hasta el fondo… sentía que su cabeza se hacía inmensa dentro de mi cuerpo. Sus manos apoyadas en la cama estaban desperdiciadas… entonces decidí llevarlo al siguiente nivel… es decir, cambié de posición.
    
    Me puse en cuatro y apoyando mis antebrazos en la cama, hundí mi rostro en la almohada… dejando mi culo completamente a su merced. Primero separó mis nalgas, abriéndose camino con sus dedos hacia adentro de mi ano… me di cuenta que tenía dos dedos de cada mano dentro de mi… ¡cuatro dedos en mi ano!
    
    Y los separaba como haciendo la V de ...
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