Dinero
Fecha: 28/09/2020,
Categorías:
Confesiones
Autor: pedrocascabel, Fuente: RelatosEróticos
Dinero
No sé qué hacer, bueno, no sabemos qué hacer. Es una oferta tentadora, mucho, necesitamos el dinero, pero nuestra relación de pareja se puede resentir. Cecilia y yo estamos bien juntos, nos queremos, sé su manera de pensar y no creo que quiera aceptar dinero porque un tío se haya encaprichado de ella y se la quiera follar. Yo quizás sea más pragmático e intento valorar todos los pros y contras, no sólo dejarme llevar por los sentimientos. La verdad es que ahora mismo diría sí, acepto, pero es ella quien tiene que decidir, yo sólo puedo dar mi opinión y apechugar con lo que ella decida, me parece lo más honesto. Partiendo de la base que creo que es repulsivo pagar por follar aprovechándose de la necesidad económica de alguien, pero…
Cecilia y yo, Luis, somos pareja desde hace unos cinco años. Ambos divorciados sin hijos ni más familia, vivimos juntos e intentamos gestionar y llevar adelante, en un pueblo de la sierra madrileña, un local que es bar —desayunos, comidas, meriendas, cenas, copas por las noches— y también es librería de segunda mano, biblioteca infantil y juvenil, organizamos todo tipo de eventos culturales, talleres y cursos de formación, actividades en la naturaleza, aula informática y de inglés... Incluso tenemos montado un gran gimnasio en el sótano del caserón de dos plantas en donde está situado nuestro polifacético bar. ¿Dinero? No demasiado, a pesar que no puede decirse que sea un fracaso, ni mucho menos, vamos tirando sin más, y ahora que ...
... hemos modernizado el gimnasio y la terraza veraniega, estamos sin un euro para afrontar los pagos de las nuevas máquinas y la sauna. Estamos jodidos porque el banco nos aprieta con el crédito que tuvimos que solicitar, y no quieren esperar, no atienden a razones.
Berni, Bernardo, es un ricachón de la zona —sus abuelos y padres hicieron dinero criando ganado vacuno de una raza apreciada culinariamente, ahora con denominación de origen, y siendo los dueños del matadero, situado en un pueblo cercano— que vive incrementando sus rentas con la construcción en distintos pueblos de esta zona de varias urbanizaciones de chalets unifamiliares que se han vendido muy bien. De poco más de cincuenta años, casado con una guapa ex actriz televisiva que le ha dado dos hijos —la parejita— estudiantes en USA, es un tipo guapo, con aspecto de pijo fachoso, que se cuida mucho —es cliente asiduo del gimnasio— y tiene fama de ser un ligón que intenta follarse a todo lo que vuela. Y Ceci, la verdad sea dicha, está muy buena.
A sus cuarenta y tres años es todo unbombonazo: de estatura media, delgada, gestos elegantes, cabello muy negro, todavía sin canas evidentes, con una densa y rizada media melena que peina con raya en medio y recoge con cinta o coletero en un moño cuando trabaja. Es guapa, mucho, a pesar del gesto de dureza habitual en su rostro, con frente amplia, pequeñas orejas redondeadas, preciosos ojazos de color azul oscuro siempre brillantes, nariz recta romana, boca grande de labios ...