1. Mi primera felación


    Fecha: 06/10/2020, Categorías: Masturbación Autor: Luisa Benites, Fuente: CuentoRelatos

    ... casa juntos en el auto bus?
    
    -Si claro lo recuerdo Alan, son momentos que nunca olvidaré.
    
    -Oye terminando las clases ¿me dejas acompañarte?
    
    -hay Alan gracias pero mi enamorado me va a recoger
    
    -Okey para otro día será, por cierto y ¿Juanjo?
    
    -hay no sé, dijo que iría a los servicios pero todavía no vuelve, a mí también ya me dio ganitas ya vuelvo cuida mi asiento.
    
    -No hay problema Lu.
    
    Cuando me dirigía a los servicios pude ver a Juanjo salir del baño de hombres y pude notar que me observaba con una mirada intensa a pesar de su corta edad hacía que yo me sienta nerviosa, entonces le di una sonrisa y lo salude con la mano, gesto que parece que malinterpretó pues fue desde ese momento que todo se salió de control.
    
    Ingresé a los servicios de damas, que por cierto estaba vacío y sin darme cuenta que Juanjo me estaba siguiendo por detrás, entré al baño,y no eché seguro a la puerta, sentada en el inodoro con el short bajo mis pies, inesperada y rápidamente se abre la puerta quedándome atónita por la presencia de Juanjo que tenía el pene más grande que había visto hasta ahora, entre sus manos masturbándose delante mío sin quiera yo poder reaccionar, al ver a ese chico con ese miembro de un Dios fue tanta la impresión que tenía la boca semiabierta, momento que el no desaprovecho para meterme todo su paquete en la boca de una manera tan brusca que me salieron lágrimas y felizmente me encontraba sentada ya que también me oriné. Intenté moverme y salirme de allí pero ...
    ... a pesar de su pequeño estatura, era obeso, por ende fuerte. Él seguía moviendo las caderas de adelante hacia atrás y viceversa de una manera que ya me parecía gracioso aunque no podía ni sonreír por la situación en que me encontraba. Él sujetándome con una mano el hombro y con la otra mi cabeza para que no dejara de chupársela.
    
    Su tremendo pene levitaba con ayuda de mi lengua involuntaria sobre mi boca. Él no me soltaba a pesar que yo le daba golpes y palmadas muy fuertes sombre sus muslos y nalgas incluso le rompí parte del polo que llevaba puesto, sentía que perdía todas mis fuerzas y con ella las ganas de seguir luchando, ya que mientras más lo hacía más me cansaba. Entonces mis golpes se convirtieron en caricias y mis miedos en placer, Juanjo notó el cambio y sus movimientos fueron más pausados, pero manteniendo la misma presión. Yo en cambio estuve completamente sumisa, más relajada y totalmente entregada de boca.
    
    Entonces empecé mi primera felación, o como otros lo llaman, “mamada”, bueno el hecho es que ahora yo tenía el control pues Juanjo estaba temblando de placer al sentir mi lengua y mis labios recorrer y sobar tiernamente su gran falo venoso y muy grande para su edad, lentamente me soltó y bajó más su buzo quedando con una mano en la cintura y la otra levantando su polo maltratado por mis jaloneos.
    
    Me di cuenta de la hora y empecé a acelerar los movimientos orales, flujos de esperma empezaban a emanar de su gran miembro, vaticinio de una gran corrida de ...