Mis memorias - Cuarto capítulo
Fecha: 08/10/2020,
Categorías:
Confesiones
Autor: Dinamujermadura, Fuente: CuentoRelatos
... que era mi prima y que estaba así por lo groseros de sus amigos, me pido que los disculpara porque eran buenos muchachos. Seguimos bailando un buen rato conociéndonos y llenándonos de licor.
Luego nos sentamos todos en la misma mesa pero con respecto a los muchachos nada cambio. Anabel se levantó para ir al baño y de venida paso por la Barra pidiendo cigarrillos, en la barra habían dos caballeros que al ella poner su cigarrillo en la boca, se acercaron a prendérselo, que a diferencia de los amigos de Arturo fueron muy galantes con ella a quien no dejaron venir con nosotros.
Al rato de estar bailando y platicando el mundo exterior se me olvido y yo estaba embelesada con Arturo, me estaba gustando y yo a él. Al rato sus amigos estaban aburridos y medio bravos porque Anabel estaba con los otros dos caballeros, Arturo si les dijo que cuando aprendieran a tratar mujeres podrían conseguir. Bueno hay discutieron un rato y al fin los dos se marcharon quedando yo ya sola con Arturo.
Paso el tiempo y cuando menos me di cuenta Anabel y los dos caballeros ya no estaban en el bar, como a la hora fue que la volví a ver ya eran las 11 de la noche, venia despeinándose su cabello y me hizo señas que de que se iba y yo pues estaba contenta pero ya mareada por el licor, me despedí de Arturo con la promesa de volver el día siguiente. Al salir del hotel estábamos esperando que llegara algún taxi para abordarlo y irnos a la casa cuando en esas se estaciono un carro y vi por el vidrio ...
... que era mi prima Sara, ella le dio un beso en la boca al caballero que venía manejando y se bajó, al vernos se acercó sonriente y nos dijo:
—Hay menos mal todavía están pero es que no me querían dejar venir. Risas.
Nos montamos en el taxi y camino a casa no hice si no pensar en Arturo, fue así que nació un romance que duro casi hasta terminar el bachillerato, la cual fue de besito e idas a cine, tomar en las heladerías del pueblo. Pasaron las festividades decembrinas, llego Enero y yo tenía ganas de ir a Bogotá a estarme unos días, pasar vacaciones, pero mi mama no me quería dejar ir por que iba a venir alguien a visitarnos. Mi tía la de Cali se fue Federico el esposo de Sara como es empleado bancario le toco viajar a trabajar, Sara y Amanda se iban a quedar dos días más, pero solo fue hasta la tarde cuando vinieron con dos caballeros y se fueron para otro pueblo y no volvieron más.
Una tarde que llegue a casa abrí la puerta mire así el costurero y mi madre no estaba entonces me dirigí a los cuarto y el de ella estaba cerrado, escuche de pronto unos gemidos. Que fueron subiendo el volumen y claro enseguida pensé que mi mama estaba tirando con alguien, me quede un ratico escuchando lo que pasaba mi madre tirando no lo podía creer, nunca la había sentido o visto algún desliz con alguien, pero al parecer la estaba pasando muy bien por sus quejidos pidiendo más y más. Me fui para mi cuarto, a esperar a que terminara su polvito, el que salió fue el caballero al baño ni ...