Forzada por mi suegro
Fecha: 29/10/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... muy satisfactorio.
A las siete menos cuarto llegó mi marido, y le dije que iba a salir con Roberto, él se quedó extrañado
y me dijo que como era eso si yo siempre le había tenido mucha manía, por otro lado, le sorprendía
verme tan arreglada.
R.- ¡Que sorpresa que salgas con Roberto! Me alegra que cambies de actitud y dejes esa manía que
tienes con él, aunque casi me da envidia, te has puesto muy guapa para la ocasión.
E.- Pues si, voy a salir con él para que tu veas que no le tengo manía, así ya te quedarás contento.
A las siete volvió Roberto, al entrar por la puerta me miró de arriba abajo y silbó.
R.- ¡Vaya belleza! Veo que te has preparado para salir, así me gusta.
Al bajar al garaje para coger el coche mi suegro me dijo que conducía él, que yo tendría que disfrutar de
al ruta.
R.- Esta mañana me dejaste claro que no querías nada conmigo, asi que yo cumpliré con ello, pero tu
tendrás que hacer lo que yo te diga. ¿De acuerdo?
E.- ¿Qué voy a tener que hacer?
R.- Tu no quieres que yo te toque, así que harás lo que yo te diga, de lo contrario hablaré con Carlos.
¿Cumplirás con lo que te diga?
E.- Siiiii, lo haré.
Fuímos hasta un parking del centro de Madrid, por la puerta del Sol, desde allí paseamos hasta la zona
de bares, donde nos bebimos una botella de vino con unas raciones, a continuación entramos en un
pub y nos tomamos dos copas, yo ya iba un poco bebida y Roberto intentaba aprovecharse para meter
su mano ...
... bajo mi falda, yo le dejaba un poco, pero cuando intantaba subirla hacia mi coño cerraba las
piernas y le decía:
E.- ¡Eh! Alto esa mano, tu no vas a tocarme, ese es el trato. – aunque estaba muy caliente no iba a
permtirle que se saliese con la suya, no iba a dejar que me pusiera una mano encima.
R.- Si así lo quieres perfecto, vamos a dar un paseo.
Al montarnos en el coche Roberto me dijo que me sentará detrás, me extraño pero lo hice. Salimos por
las calles y Roberto me miraba por el espejo interior del coche, el alcohol estaba haciendo su efecto y yo
ya llevaba la minifalda un poco subida y casi se dejaba ver mi culotte de encaje.
Roberto paró el coche, bajó la ventanlla y llamó a unos chicos, les dijo algo, ellos miraron hacia donde yo
estaba y se subieron en la parte de atrás junto a mi, me sentí algo incómoda e intenté reaccionar, pero
no me dio tiempo.
R.- Bueno Elisa, ahora comienzan mis deseos que tu debes cumplir, estos dos jovencitos están deseando
verte en acción, así que baja tu cabecita y comienza a comerles la polla a los dos, como verás las tienen
completamente duras.
Los dos de habían abierto las cremalleras y habían sacado sus vergas que estaban completamente rectas
mirando al techo del coche.
E.- De eso nada, no voy a hacerlo.
R.- Lo prometiste, asi que debes cumplirlo. Además, solo te pido que chupes dos pollas un ratito, no es
mucho.
Uno de los chicos tomó mi mano y la llevó a su polla, con suavidad la ...