Insesticuernos - Relatos Eróticos

Insesticuernos

... esas que solo había visto en las películas porno, llena de venas súper marcadas con un capullo enorme que hacían juego con su par de huevos colgando que parecían unas naranjas llenas de pelos negros al igual que su bigote y para terminar chorreante de líquido preseminal.

Y así comenzó a masturbarse delante de ella de una manera salvaje, sacando todo el deseo que tenía reprimido dentro de él, en ocasiones le tomaba su mano y se la enredaba en su verga para que ella lo masturbara, otras, más le daba pequeños golpes con su verga en la cara en sus tetas y hubo una ocasión en la que intentó metérsela a la boca sin lograrlo, pero estuvo mucho rato ahí restregándole la verga en la comisura de sus labios.

No podía creer lo que veía hasta que escuché algo que me dejo helado.

-Ahora si mi amor hay que darle su lechita a mi bebe.

¿No podía yo creerlo se iba a venir sobre su cara? Pero entonces escuché:

-No sabes lo caliente que me ponen las medias que usas así que entonces ellas recibirán mi leche.

Y así fue, empezó a masturbase cerca de sus piernas, muy rápido hasta que se escuchó un bufido de placer acompañado de unos chorros de semen exagerados que cayeron en sus medias, en su liguero, uno más cerca de su cara y cerca de su tanga, pero la mayoría se derramó en sus medias dejándola toda batida de semen. De inmediato sacó su celular y comenzó a sacar fotos de su triunfo y se subió los ...

... pantalones, le dio un beso no vi exactamente dónde y se acercó hacia mi mientras me tomaba el hombro, dijo:

-Que patético yerno tengo, mira que dejar que otro hombre se venga en su esposa jajajaja bueno yerno me despido que buen regalo me trajo santa.

Y sin más se fue apagando todas las luces y dejándonos ahí.

Esperé a no escuchar ruido y me levanté rápidamente a encender la luz de la sala y ahí vi esa imagen salida de una película cuckold como las que acostumbro a ver, Karina ahí llena de semen de otro hombre como siempre lo he querido y que morboso que era el semen de su propio padre el cual descargó toda su furia en ella. Me saqué rápido mi verga, obvio nada que ver con la de mi suegro, e hice exactamente lo mismo que hizo su papá, masturbarme con lo que acababa de ver y con la imagen morbosa de mi esposa bañada por leche de un verdadero macho.

Me masturbaba de una manera muy deliciosa, estaba súper excitado y tomé la mano de mi esposa y comencé a hacer que se embarrara los lechones de semen sobre sus medias que cubrían sus ricas piernas y sin poder contenerme más me vine igual en sus medias.

Después de descargar mi excitación, la limpié con una toalla y como pude la desperté para llevarla a nuestra recámara, la acosté y me acosté con ella. Durante la noche tuve que masturbare otras veces, más cuando escuché los gemidos de mi suegra mientras se la cogía de una manera muy fuerte mi suegro.