1. La historia de Ángel, solo era un muchacho (29)


    Fecha: 17/10/2017, Categorías: Gays Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos

    ... la intensidad de tu agradecimiento. -quise alejarme de él y como me tenía sujeto con fuerza lo único que pude hacer fu empujarle con mis nalgas proyectándolas hacia atrás. Fue un mal movimiento por como él lo interpretó.
    
    -¿Qué, tu culito necesita de mis caricias? -y sentí palpitar, moviéndosele, la verga contra mis nalgas.
    
    -¡No David! Estamos en la casa de don Mateo y Victoria, se supone que soy el novio de su hijo. -como un relámpago pasó por mi cabeza mis encuentros con Pablo en la misma habitación, para ellos no puse muchos problemas, pero tampoco iba a resultar tan facilote como para dejarle que cumpliera lo que quería sin oponerme, u ofrecer una digna oposición que me dejara en el lugar correcto.
    
    David me soltó y suspiré aliviado, volvió a sentarse donde estaba, colocando la mano sobre el enorme bulto de la erección de su entrepierna.
    
    -Lo siento Ángel, creía que te apetecería y que te era agradable por los otros momentos íntimos que hemos tenido, pero entiendo que ahora tienes lo que deseas, dos afortunados hombres para que te gocen y que además son mis amigos.
    
    No se lo que vi en sus ojos grises, dolor o pena, quizá ambas cosas y para mi era tremendo ver que causaba esas sensaciones cuando estaba acostumbrado a lograr que los hombres se sintieran felices a mi lado.
    
    Fui rápidamente hasta el borde de la cama y me arrodillé abrazando sus piernas y colocando la cabeza sobre sus muslos.
    
    -No es eso David, perdóname. Tu me encantas, me dominas como nadie ...
    ... lo hace pero estoy confundido, te me escapas de mi razonamiento y no se explicarlo. -me acarició el cabello y sentí las yemas de sus dedos pasar por mis ojeras y cuello logrando que me estremeciera.
    
    -Supongo que Álvaro y Pablo te tratan bien, confío en que así sea, y a pesar de todo lo que eres, sobresale que también eres leal, a ellos y a tu dignidad. -suspiró inspirando profundamente y continuó metiendo los dedos entre mis cabellos acariciadores y tiernos.
    
    -Déjame decirte una cosa Ángel, tu eres un ser especial, lo he podido constatar entre todos los que te han tratado, sobre todo los que has estado íntimamente contigo y te han probado. -sin darme mucha cuenta de lo que hacía subí una mano a su entrepierna y la coloqué sobre el prominente bulto de su polla.
    
    -Creo que don Manuel se equivocó al regalarte a su sobrino, no porque crea que no mereces lo mejor, simplemente porque pienso, como muchos, que tu no eres, ni estás, para dar placer a uno o dos hombres simplemente. Ahora eres libre por deseo de Álvaro, pero no olvides que también es un deber, para los que pueden y tienen esa facultad, hacer felices a lo hombres que te rodean. -se inclinó y cogiéndome por los sobacos desnudos me incorporó abrazándose a mi cuerpo.
    
    -Me gustas Ángel precioso, solo con pensar en ti se me endurece la polla aun estando lejos, y ahora mira como me tienes. -se separó unos centímetros para que viera con los ojos lo que sentía presionando en mi vientre. Gemí y me apreté contra él para ...
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