1. Mi primera vez con una trans (Cuarta parte)


    Fecha: 17/10/2017, Categorías: Transexuales Autor: buitrepanda, Fuente: CuentoRelatos

    ... para darnos un beso labial, y fue hacia el bidé para higienizarse el ano, y mientras lo hacía, empezó a jugar con su pene, el cual se le fue poniendo erecto, pero cuando se dio cuenta que la estaba mirando, lo tapó en seguida con sus manos. Luego que ella se levantó, me dio otro beso y fue hacia el cuarto. Lo que yo hice fue acercarme al bidé, sentarme y comenzar a higienizar también mi ano. Acto seguido salí del baño, entro al cuarto y la veo a ella, ya acostada, dándome la espalda, con su codo izquierdo apoyado en la cama y su cara mirando hacia atrás, para verme salir del baño.
    
    "¡¡¡Mi amor!!! ¡¡¡Qué divino que sos!!! ¡¡¡Vení de una vez a la cama!!!"
    
    Por supuesto que no la hice esperar. Me acosté contra ella, haciendo "cucharita", mientras nos dábamos hermosos besos apasionados llenos de lengua y amor. Demás está decir, que al darnos esos besos, no pude contenerme más, y con mi mano derecha fui directamente a agarrarle su pene, que en esos momentos, YA estaba bien pero bien erecto, duro y calentito.
    
    Al sentir mi mano agarrando su pija, Sylvia me dijo:
    
    "¿Te gusta mi pija, mi amor?", mientras agarraba mi mano y comenzó a pajearse con mi mando y la de ella.
    
    "Sí. Me gusta. Está bien calentita", le dije, y la seguí besando.
    
    Al responderle, se dio vuelta y quedó boca arriba, con lo que su pedazo de unos cuantos centímetros de largo (no lo sé exactamente, porque nunca supe calcularlo), y el ancho, hermoso, apetecible, quedó erecto, tal verga de barco, a la ...
    ... vista de mis ojos. Recuerdo que lo primero que hice besar a Sylvia con muchísimos besos con mucho amor, para luego comenzar a besarla apasionadamente.
    
    "Bajá, mi amor. Metete mi pija en tu boca. Saboreala", me dijo.
    
    "Ni falta hace que me lo pidas", le dije, y quedando perpendicular a ella, le besé esas hermosas tetas bien formaditas, sin dejar de agarrarle la pija, hasta que mi boca fue directamente hacia ese hermoso pedazo de carne caliente y me lo fui metiendo muy de a poco dentro de mi boca. ¡¡¡Qué placer sentir esa tibieza dentro de mi cavidad bucal, en mi paladar, y en mi lengua!!! Se la empecé a chupar con una suprema avidez y le pasé la lengua como si fuera un helado de cucurucho. ¡¡¡Y qué cucurucho!!! Mientras se la chupaba se la iba pajeando, y Sylvia, se meneaba de tal manera que me cogía dentro de mi boca.
    
    "Así mi amor. Así", me repetía a cada instante, "Te quiero, mi amor. Te quiero. Te deseaba desde el primer día que me subiste a tu auto"
    
    Al escuchar eso, se la empecé a chupar cada vez con más pasión y ligero, mientras ella, también me empezó a coger en la boca cada vez más ligero y con fuerza que sentía su pija cómo llegaba a mis amígdalas.
    
    "¿Te gusta mi amor?", me preguntó.
    
    "Mmmm", le respondí sin dejar de chupar y moviendo afirmativamente mi cabeza, confundiéndose con el movimiento que estaba haciéndole al chuparle la pija.
    
    En eso siento su mano derecha aprisionando la mía, comenzando a pajearme.
    
    ¡¡"Mi amor. No seas angurriento. Yo también ...
«1234...»