1. Laura: Una mujer diferente


    Fecha: 18/01/2021, Categorías: Primera Vez Autor: Little Sex Warr, Fuente: CuentoRelatos

    ... intentado seducirme sin logarlo, pero que ahora estaba seguro que también yo lo deseaba, que mi forma de vestir y de actuar me delataban y que estaba dispuesto a ofrecerme cualquier cosa con tal de aceptar en ese momento coger con él.
    
    Sin más, su boca volvió a buscar la mía, esta vez con mucha más suerte, pues el beso que siguió a continuación fue largo y húmedo, agresivo y lleno de lenguas que se enmarañaban una con la otra. Nuestras manos buscaban el cuerpo del otro, el deseo y la pasión nos envolvían, al tiempo que desabrochaba su pantalón y sacaba aquel bello instrumento, que con el solo tocarlo, adivinaba largo y grueso, casi negro y cubierto con tupido pelambre, el bajaba hasta los tobillos, la poca ropa que cubría mi sexo, me tomo de las axilas y me subió de un tirón a una de las lavadoras, donde sin ninguna objeción de mi parte, clavarme hasta el fondo aquel fierro candente. Entro hasta el fondo sin problemas, lo esperaba una húmeda vagina deseosa de ser penetrada sin piedad, tomándome de las nalgas, clavaba una y otra vez su verga en mí, y yo con las piernas en sus glúteos y mis manos en su cuello, empujaba para provocar mayor penetración de su parte. No paso mucho tiempo para vaciarme en un riquísimo orgasmo, mientras el eyaculaba en mi interior, llenándome de sus mocos calientes y en abundancia.
    
    Mientras tomábamos un respiro, acomode uno de los cobertores que teníamos lavados y que el cliente no había pasado por él, para usarlo como cama. Mientras me ...
    ... desnudaba, mire como Ricardo hacía lo propio, y pude apreciar como aquella verga que apenas tenía unos minutos de haberse vaciado, tenía un tamaño impresionante aun en estado de reposo, lo tome de la mano para recostarlo y así poder llevarme aquel pedazo de carne a mi boca, quería que pronto recuperara su tamaño máximo, para poder disfrutar nuevamente de su intrusión en mi cuerpo, él se acomodó no solamente para recibir, sino también para dar, un 69 que por sí solo, provoco un nuevo orgasmo de mi parte, su lengua se hundía tan dentro de mi que pensaba que era poseída nuevamente, lo hacía con tal maestría que con ella lograba darme total placer, mientras yo, con muy poco de mi parte, veía como su miembro viril, volvía a tomar dimensiones increíbles, mi mano no alcanzaba a rodearlo por completo y mi boca no daba suficiente apertura para poder meter por completo su glande.
    
    Me acomode nuevamente para recibir mi dotación de carne, Ricardo se puso encima mío, tomándome de los tobillos para abrir mis piernas completamente, y esta vez poco a poco hundirme su miembro hasta topar con mi útero. Ahora no hubo salvajismo, con ternura fue metiendo y sacando aquello que tanto me complacía, besaba mi boca y mis senos al tiempo que sacaba por completo y hundía nuevamente hasta el fondo se caliente garrote, a la quinta o sexta intrusión, mi cuerpo no aguanto más y por tercera vez descargue mi tensión sexual en un inacabable orgasmo, esta vez acompañado de fuertes contracciones de mi pelvis y ...