-
En el portal
Fecha: 27/03/2021, Categorías: Gays Autor: PobreCain, Fuente: CuentoRelatos
... has hecho sentir viva es cierto y entenderé que te sientas decepcionado pero eso de que te quedes a pasar la noche sigue en pie. Pase lo que pase dudo que siga adelante con la boda; no ahora que se parte de lo que me estoy perdiendo y estoy segura que con un poco de paciencia encontraré a alguien capaz de hacerme sentir bien; mi novio es una buena persona pero no me satisface y a pesar de que he tratado que probemos cosas nuevas no reacciona; él se conforma con que lo que tiene pero yo ahora ya no. Dicho esto Nina callo y en silencio Tony fue donde había quedado su ropa y regresó con ella al sofá instalándose junto a la mujer que lo miró con curiosidad, curiosidad que disipó de inmediato aclarándole con voz pausada. —Al llegar al portal puse el móvil en silencio y supongo que Ariadna habrá intentado contactar conmigo al no encontrarme en “Alameda 35” voy a ver que hay. Tony consultó el teléfono y leyó el único whatsapp que le había llegado. <Disculpa n puedo ir ha surgdo 1 imprevisto hablamos manna, dm algo> Miró a Nina largamente como valorando la situación y sonriendo respondió con un escueto. _m qd sin batería mñna nos leemos _ Girándose dijo a Nina muy serio. —Sigamos con lo nuestro; muéstrame a que te referías con lo de probar cosas nuevas. —Para ponerlo en situación vimos juntos varios DVD porno y puedo decirte que soy capaz de hacer todo cuanto se muestra en ellos; pero al proponerle intentar alguna de ellas al bobo de mi prometido ...
... respondió escandalizado. .- <Esas cosas no son para practicar en pareja; aunque es extraordinario cuando lo haces con alguna de esas depravadas que se ganan la vida vendiendo su cuerpo> Se apartó y mirando a Tony con descaro musitó. —Vamos a mi habitación; compre algunos pañuelos con la seguridad que les daría gratas aplicaciones pero todavía no he tenido oportunidad de estrenarlos. Presidia la espaciosa estancia una enorme cama de latón con dosel; Nina sacó de un cajón uno cuantos pañuelos de vistosos colores y preguntó. —¿Me dejas que te ate o prefieres atarme tu? —Es tu fiesta y yo tu regalo; trátame bien porque después cambiaremos. Tony se tendió en medio de la cama y alargó brazos y piernas en dirección a las columnas que soportan el dosel; ató sus tobillos y muñecas sin forzar las ligaduras que eran testimoniales y para terminar; después de besarlo largamente cubrió su rostro con otro pañuelo. Tony notó como paseaba los dedos por su pecho y vientre para dedicarse después a las piernas; un leve soplido dio paso al principio del suplicio al que fue sometido; ligeros lengüetazos en el interior de los muslos hicieron que se tensara y eso animó a Nina que continuó con el juego y lamio los huevos casi de pasada y apartando la verga regresó a ellos sorbiendo uno y presionándolo con la lengua contra el paladar para repetir la operación con el otro y a continuación fue lamiendo y mordisqueando el tronco hasta llegar al capullo; retiró el prepucio con los labios ...