Georgina... 38 - Relatos Eróticos

Georgina... 38

... que mi culo se iba a partir en dos, mi calentura iba en aumento... !por fin estaba gozando con una vergóta metida en el culo! era maravilloso estar sometida a los caprichos de mi macho !estaba siendo cogida como a una mujer! !y me gustaba! pérdida en la embriaguez del sexo anal, gozando de esa rica vergóta entrando y saliendo de mi culo, me sentí por fin completa... esa deliciosa culeada estaba haciendo de mi una auténtica puta, siempre había aceptado mi condición de maricón, de homosexual... pero esa deliciosa cogida definió mi auténtica personalidad, desde ese día en todas mis relaciones siempre he sido la mujercita, la que recibe verga por el culo.

Interrumpí el relato de Berta preguntando: oye comadre... entonces antes de que Pedro te cogiera nunca te habías sentido mujercita?

- No comadre... yo sabía que era maricón desde muy niño, lo sabía porque me gustaban los hombres, y siempre fui amanerado pero nunca había definido mi rol sexual... con Pedro aprendí la diferencia entre "pasivo" y "activo" con él comprendí que a mí me gusta ser la parte receptiva, hablando claro: a mí me gusta adoptar el papel de mujer en las relaciones sexuales.

- Pero si te sentías mujer entonces por qué no te vestías de nena comadre?

- Pues la verdad es que en esa época simplemente me iba a coger con cualquier chico homosexual que me gustara, simplemente era sexo entre dos personas del mismo sexo, siendo uno activo y el otro pasivo... me entiendes?

- Si comadre... y luego que ...

... pasó?

- Pues una vez que quedó definido mi rol en la relación, asumí completamente mi papel de mujercita, forzando un poco la voz le pedía a mi macho que me cogiera más fuerte, le rogaba: !méteme toda la verga mi amor! !me gusta mucho como me estás cogiendo papi! !dame más duro! !cógeme más fuerte Papacito! y mi macho al ver que yo estaba totalmente entregada aceleró sus estocadas, yo solo pujaba y meneaba mis nalgas como una verdadera puta... Mi verga estaba completamente tiesa, desesperada le pedí que me masturbara mientras me cogía salvajemente... Al sentir su mano sobando mi verga sentí una corriente muy rica en todo mi cuerpo y tuve un orgasmo intenso derramando mi leche en la cama... por primera vez me viene mientras me cogían, nunca imaginé que fuera tan rico ser culeada, es realmente delicioso sentir una verga taladrando mi culo.

- Pedro continuó cogiéndome durante unos minutos más, yo estaba completamente desmadejada gozando de los espasmos de mi orgasmo hasta que se vino abundantemente dentro de mi culo, llenándome de leche las tripas... !ay comadre fue sensacional! ya era toda una mujercita, a partir de ese día fui la putita de Pedro... me cogía siempre que podía, yo le daba dinero para que me llevara a un hotel y me pudiera coger a gusto, él y su familia eran muy humildes, así que comencé a darle dinero para que pudiera comprar ropa y todo lo que más le gustara y de paso cumplirme mis caprichos... Pedro decía que era mi "gigoló" y yo le respondía que si que era ...