Georgina... 38 - Relatos Eróticos

Georgina... 38

... mi amado "padrote".

- Aunque todo el mundo conocía nuestra relación delante de los demás Pedro siempre me llamaba Roberto, pero en la intimidad me llamaba "Betty" me gustaba mucho... cuando me cogía me decía: Betty ponte de perrita porque te voy a meter la verga, Betty mámame la verga o que ricas nalguitas tienes Betty, me ponía muy cachonda que me tratara como mujer y me llamara Betty... durante mucho tiempo fuimos amantes me daba unas cogidas riquísimas yo estaba perdidamente enculada con mi novio, solo pensar en la forma en que me culeaba me ponía cachonda, adoraba a ese hombre y adoraba más su rica vergóta.

Me daba unas culeadas riquísimas me dejaba el culo bien abierto y escurriendo mocos, no me cansaba de recibir su rica vergóta en mi apretado culito, me cogió de todas las formas posibles, de pie recargada en la pared, empinada en la orilla de la cama, yo de espaldas con mis piernas alrededor de su cintura o con mis piernas sobre sus hombros, sentada sobre el dándome de sentones en su vergóta, de lado con mis piernas abiertas pero la que más me gustaba era cuando me ponía como perrita y le ofrecía mi culito para que me clavara la verga hasta el fondo... adoraba sentir sus huevos chocando con los míos, me gustaba sentirme sometida.

- Sin embargo por cosas del destino terminó nuestra relación después de dos años y cuatro meses tuvimos que separarnos.

Intrigada le pregunté a mí comadre: porque terminaste con el Berta?

Contestó: huy comadre... fue por ...

... algo bien cabrón, recuerdas el movimiento estudiantil de 1968?

- sí, contesté yo estaba estudiando el primer año de la vocacional... fue un desmadre.

- pues Pedro andaba muy metido en el movimiento, repartía propaganda en las calles y asistía a todas las asambleas, yo no lo acompañé nunca porque mis padres me habían prohibido meterme en la bronca, bueno... el día de la matanza de Tlatelolco el 2 de octubre, Pedro asistió para organizar la marcha. El caso es que durante el desmadre de la masacre entre los desaparecidos estaba Pedro, al día siguiente de la matanza me enteré por los periódicos de todo lo que pasó... después de tres días sin noticias de él fui a buscarlo a su casa, su madre llorando me dijo que no sabía nada de él. yo desesperada acudí a mi padre porque era muy influyente, sin embargo no pudo localizar a Pedro... Después de varios meses suspendimos la búsqueda de Pedro, yo estaba desolada había perdido a mi hombre, mi primer amor... me sentía muy mal, como una viuda fue un golpe muy doloroso para mí.

Con lágrimas en los ojos y con la voz quebrada mi comadre continuó: perdón comadre... pero es que después de tantos años aún me acuerdo de él, lo amaba tanto era el amor de mi vida. Sin embargo el tiempo cura todas las heridas, poco a poco las cosas volvieron a la normalidad, seguí estudiando, conseguí nuevos machos, reanude mis puterías cada día me volví más y más puta hasta que llegó el día que te conocí comadre... te acuerdas?

- Si comadre claro que me ...