48.3 Apuesta ganada a la suerte
Fecha: 16/06/2021,
Categorías:
Anal
Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos
... pide que nos acompañes. –Denis solo sonrió complacido.
La vuelta fue más animada y Jean hablaba sin cesar, para que escuchara Denis que no le prestaba atención, lo suyo era conducir y hacer preguntas a Gonzalo.
-Déjale que conduzca, luego le hablas, ¿no querrás que tengamos un accidente? -acariciaba su mano y al callar me hecho los brazos al cuello y besaba mi cara como un niño entusiasmado.
-Os quiero Daniel. –Gonzalo se reía sin descuidar a Denis vigilando que lo hacía. No se atrevió a meter el coche en el parking del hotel y de eso se encargó Gonzalo, subimos a las habitaciones para prepararnos y salir.
La cena, con alguna variación, resultó muy parecida a la de ayer y Jean la abonó con dinero que le había entregado André. Les dejamos en su juvenil ambiente, con el resto de los chicos que hoy vinieron a saludar a los dos. Lo de hoy con los muchachos había estado genial y mucho del mérito era de Gonzalo.
Nos sentamos en los jardincitos al lado de la catedral y tiré mi rostro hacia atrás mirando al cielo, comenzaba a anochecer y se escuchaba el sordo ruido de la ciudad.
-Te adoro Gonzalo, gracias por ser así, has logrado que todo discurriera tan natural, haces que todo parezca sencillo y tienes buena mano para los chicos. –me abrazó y buscó mis labios para depositar un leve beso en ellos.
-Tú sabes mucho de eso, siempre he estado cuidando de ti aunque ya no me acuerdo de los detalles. -me abracé a su pecho y descansé mi cabeza en él.
El paseo era ...
... lento y silencioso sintiendo el calor de nuestras manos unidas, mirando al resto de las parejas que a veces se besaban abrazados en las calles, escuchando las risas más ruidosas de los grupos.
-Ahora que lo estoy pensando, creo que me merezco un premio. -se le notaba un tono incisivo y burlón. Decidí seguirle la broma.
-¿Y qué quieres de premio?, ¿una condecoración?, ¿la Legión de Honor quizá?-agarró con fuerza mi culo que cabía en su mano y no contestó.
-¿Así que se trata de mi culito?, ese es tuyo sin necesidad de tenerlo como premio, pero si demás de él añado una mamadita seguido, ¿qué te parece ahora? -aprieta de nuevo mi nalga y creo que me deja marca.
-Que quiero estar ya en la habitación. -muerde con fuerza su labio y alarga el paso tirando de mi cintura.
Se acercó a la recepción a pedir la llave mientras yo iba directamente a los ascensores, estaba sosteniendo la puerta automática para que no se cerrara y en un segundo llegó él. Comenzó colocando sus manos en mis nalgas para acercarme a él comiendo mi boca, y tiré de la cremallera de su pantalón, bajé el elástico de su bóxer para que mi mano cogiera su esponjosa verga.
-¿Quieres que te la mame aquí mismo? -se lo decía para provocarle y su respuesta fue atrevida incitándome a que lo hiciera.
-Sí, arrodíllate. -no había muchas posibilidades de que paráramos en un piso intermedio y le obedecí riendo, saqué su polla y pude meterla entera en mi boca, fueron sesenta segundos, o menos, de mamarla con ...