Matilda, guerrero del espacio (capitulo 25)
Fecha: 14/08/2021,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: calvito, Fuente: CuentoRelatos
... umbilicales.
—Umbilicales fuera. Reactores al 10 %.
—Suelten amarras. Atrás un cuarto, —el Tharsis, fue deslizándose suavemente fuera de la dársena del puerto.
—Falta tu hermano, la comandante Johari, Daq y Camaxtli, que se va a poner como una furia por irnos sin ella, —dijo Moxi, desde el puesto del primer oficial. Viendo la cara seria de Matilda, añadió—. Y tienes a tu primer oficial durmiendo en su camarote. ¿Crees que es buena idea irnos sin ellos, Matilda?
—Posiblemente no, ni yo misma sé muy bien porqué lo estoy haciendo, —respondió en tono bajo, después de guardar silencio unos segundo. Después, con una leve sonrisa, añadió—. Posiblemente se me ha ido la olla, y me tengas que relevar del mando.
—Eso no va a pasar nunca, ya sabes que eres ni chica favorita.
—No te preocupes, ya lo solucionaré más tarde… de alguna manera, —y cuando la nave terminó de salir de la dársena, añadió —. Rumbo 297938, impulso, avante a toda.
—Rumbo fijado en impulso, avante a toda, capitán.
—Estas coordenadas corresponden a Konark, —dijo Moxi.
—Lo sé. Refuercen el campo místico. Preparados para salto.
—Todos los sistemas prevenidos, capitán.
—Amortiguadores de inercia.
— Amortiguadores de inercia conectados, capitán.
—Abriendo vértice de salto.
—Alarmas de salto, activadas.
—Saltamos. ¡Ya!
Las alarmas de salto despertaron a Ushlas en su camarote. Se incorporó rápidamente, miro por la ventana y comprobó que estaban en hiperpropulsión. Sin ...
... perder tiempo, se puso el uniforme y salio hacia el puente. Entro en él, y Moxi la cedió su puesto al lado de Matilda.
—No teníamos programada ninguna salida, —dijo Ushlas.
—¿Tiempo de llegada a Konark? —preguntó Matilda, ignorando a Ushlas.
—Tres horas, capitán, —Respondió Moxi.
—Estoy en mi camarote, avisadme cuando lleguemos. Primer oficial, tome el mando, —Matilda se levantó de su sillón y abandonó el puente.
Ushlas y Moxi, se miraron pensativos, intentando entender que estaba pasando. Matilda, nunca había actuado de una manera tan extraña e irresponsable.
—Matilda ha desactivado la videovigilancia en su camarote, no quiere que la vea, —informo A2.
—Moxi, toma el mando, —dijo Ushlas—. Voy a hablar con ella. Manda un mensaje a los de Numbar para que no se preocupen.
Salio del puente y se dirigió al camarote. Llamó, y como nadie contestaba, entro. Matilda estaba de pie, mirando por el ventanal del camarote.
—¿Qué te pasa, Mati? —preguntó nada más entrar—. Has salido sin los oficiales mayores, y eso no es reglamentario, lo sabes muy bien.
—No me pasa nada, y no es buen momento para discutir, —respondió sin dejar de mirar por la venta—. Déjame sola.
—De eso nada, —la respondió cogiéndola del brazo para que se girara—. Vas a decirme ahora mismo que…
Matilda, la cogió de la guerrera y le dio tres puñetazos en el rostro que la dejaron casi inconsciente. Sujeta de la ropa, y como si fuera una muñeca de trapo, la levantó del suelo y la arrojó con ...