Orgasmos de pis - Relatos Eróticos

Orgasmos de pis

... ducha y se lavó.
Fuimos a mi habitación besándonos y le comí su cuerpo, oliendo su perfume. Nos tumbamos en la cama y me la follé de lado con mi polla dura. Me volvieron a dar ganas de mear y la llene por dentro. Cuando acabé me llegó el orgasmo.  
A continuación, apoyó los pies en la cama mientras se masturbaba el clítoris como una loca. Tuvo varios espasmos que la hacían levitar casi y como gritaba. Había tenido un superorgasmo o varios seguidos brutales.
Las semanas siguientes llamé a María casi todos los días, pero no conseguí convencerla para que nos viésemos. Diabólica mujer.
Así que con mi 44 cumpleaños decidí celebrarlo realizando esta práctica del pis con alguna de mis amigas. Pero intuía que no iba a ser fácil. Llamé a dos chicas feas pero muy sexys con las que había tenido relaciones. Una era mi esclava Eva María así me gustaba llamarle). Una chica muy bajita, pero con un culo muy atrayente y dispuesta a todo, sabedora de sus circunstancias físicas y la otra la señora Inés de casi sesenta que me ponía mucho por lo robusta que era. Aunque rechoncha también era muy maciza.
Las dos me dijeron que sí sin titubear. Estaban locas por mí y yo por ellas. Les pedí que quedásemos en mi casa. Y hasta allí fueron las dos.
Decidimos ir a tomar algo y precisamente al disco pub famoso. Sabiendo ellas lo que yo les iba a hacer.
Nos tomamos varias consumiciones. Cuando ya me entraban ganas de orinar pasamos al baño. Cerramos el alojamiento del váter. Me bajé los ...

... pantalones quedando desnudo de cintura para abajo. La polla estaba dura. La dirigí a ella, vestidas con sus pantalones vaqueros y jerseys.  Las fui poniendo mojadas mientras me masturbaba porque estaba muy cachondo logrando correrme en medio del pis. Fue muy intenso. Me abracé a ellas y las besé en la boca y en las caras.
-	Si, mi amor- decía Inés.
Mi cara en medio de las suyas y de sus alientos.
Nos volvimos a casa y algunas personas se dieron cuenta de que íbamos con la ropa mojada. Al llegar lo primero que hice es meter todo en la lavadora. Después desnudos nos metimos en la bañera. Tenía nuevas ganas de hacer pis.
-	Beberme el pis- les dije
Y lo hicieron. Sobre todo, la madura Inés que empujaba a un lado a la otra. Luego me senté y me mearon las dos encima. Me masturbé y me corrí saliendo mucho semen y algo de líquido.
Nos acostamos en mi cama y los tres nos quedamos dormidos. Yo, sobre todo.
Al día siguiente la primera en levantarse fue Eva María que se metió en la ducha. Aproveché para despertar a Inés, esa señora de casi sesenta y tan morbosa. La levanté y se la metí por detrás, pero por el coño. Al mismo tiempo le azotaba en las nalgas. Al principio me dio corte pero ella me dijo que no tuviese reparos. Entonces fui incrementando los porrazos. Estaba haciendo lo que quería con aquella mujer que estaba tan loca por mí.
-	Mi marido no me hace esto- me dijo.
Seguí atizándole durante muchos minutos hasta que llegué al orgasmo. Como gritábamos.
-	Quiero hacer de todo ...