1. El Niño de la Casa (Episodios 1-5)


    Fecha: 19/03/2020, Categorías: Incesto Tus Relatos Autor: Phoenix1986, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... y mi tía también entraron al agua. Hice el esfuerzo mental de serenarme. Necesitaba pensar en cualquier otra cosa y que aquella erección bajara para poder salir del agua sin atraer miradas escandalizadas. Cuando lo estaba haciendo, concentrado en lo mío, noté que alguien me agarraba por detrás y me aprisionaba entre sus brazos, aparte de unos pechos que se apretaban a mi espalda:
    
    -¡Ahora te he pillado yo! -dijo mi hermanita Marta- No te escaparás de mis cosquillas... 
    
    Empezó a cosquillearme y yo no sabía que hacer. Me había cogido por sorpresa y me estaba haciendo reír. Por otra parte me molestaba aquella interrupción para solucionar mi problema. Y además, tanto contacto piel con piel con la chica a la que a penas hacía unas horas le había tocado una teta, aunque fuera mi hermana, me estaba poniendo peor. No podía llamar la atención ni enfadarme porque todas me hubieran preguntado si tenía algún problema y yo hubiera pasado una verguenza tremenda. Tenía que quitármela de encima como fuera. Me giré, le devolví las cosquillas para ganarle terreno, sin decir apenas nada. Ella se encaró más y se tiró en plancha para immovilizarme, toda encima de mi cuerpo. Noté como con su vientre me presionaba la polla y la expresión de su cara cambiaba a la de sorpresa: lo había notado, sin duda.
    
    Se separó de mi disimulando, como si el juego ya hubiera acabado, mirándome de reojo. Yo no podía más, tenía que salir de allí sin ser muy observado. Miré como Ainara estaba relajada ...
    ... flotando en la superficie del agua. Vi a Marta alejándose, nadando hacia Laura para cambiar de compañero de juegos. Vi a mi madre y a mi tía hablando sentadas en la zona de la piscina donde había escaleras para bajar andando. Tenían medio cuerpo fuera del agua y me fijé en sus bikinis, que guardaban aquellos dos pares de pechos divinos y generosos. Fuera como fuera, nadie me miraba y decidí salir por la escala de metal donde no estaba ninguna de ellas.
    
    Caminé hacia la entrada de mi casa y, de reojo, pude ver como Marta le contaba algo a Laura con cara de preocupada y esta última me miraba. Yo intentaba disimular mi paquete pero se me hacía muy dificil... creo que me vió de pleno. Cuando ya estaba a punto de entrar oí la voz de Ainara:
    
    -¡Robe! ¿Donde vas?
    
    -Al lavabo -respondí yo sin decir ninguna mentira.- Ahora vuelvo...
    
    -¡No vayas a la cocina, cielo! -dijo mi madre.
    
    -Tranquila mamá... -grité ya desde dentro de la casa. No pensaba ir, el pastel que tuvieran allí ya lo vería luego, ahora tenía otra necesidad...
    
    Cuando llegué al baño me saqué rápido la polla del bañador. La vi enorme. Dura, contundente y ancha. Estaba totalmente descapullada, no recordaba haberla visto nunca de aquella manera. Me toqué por pura necesidad, me la agarré y me la acaricié haciéndome estremecer de gusto. Me masturbé aumentando la velocidad por momentos. No podía dejar de pensar en los muchos pares de tetas retenidas en ceñidos bikinis que me habían provocado aquell calentón. Deseaba ...
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