1. ¿Jugamos?


    Fecha: 30/11/2017, Categorías: Transexuales Autor: Nikaibz, Fuente: CuentoRelatos

    Cuando conocí a Vitoria no me imaginaba como le gustaba jugar, parecía tan cariñosa tan tranquila.
    
    Nos conocimos en internet, en una página de contactos, yo sólo buscaba amistad porque tenía pareja, aunque la verdad es que estábamos bastante mal y yo había pensado en dejarlo.
    
    "Se busca chica para amistad o lo que surja" pinche su perfil y vi que era de mi ciudad, así que le dejé un mensaje:
    
    "Hola, soy Sara y estoy buscando amistad me gusta pasear, el cine. Soy sincera y amiga de mis amigos".
    
    A la semana recibí una contestación dándome su email e invitándome a chatear; yo acepté sin pensar y al día siguiente comenzamos a hablar y nos hicimos amigas. Ella me confesó que buscaba pareja pero que podíamos ser amigas ya que yo tenía a alguien. Nos mandamos fotos y resultó ser guapísima, morena de ojos marrones más alta que yo y con carita de ángel. Al final, después de una semana, nos decidimos a quedar y cuando la vi lo primero que pensé fue en acostarme con ella. Tenía unos labios perfectos para morderlos y lo poco que pude distinguir de su cuerpo, porque llevaba un chándal, fueron sus pechos pequeños. Noté que ella también me miraba de arriba a abajo, yo llevaba unos vaqueros y una camiseta ceñida con un escote que dejaba ver bien el canalillo que hacían mis dos tetas, las cuales, eran más grandes que las suyas. Al ser yo bajita y no de complexión delgada, creí que como mujer no le gustaba pero me sorprendió cuando al verme me soltó:
    
    - ¡Qué guapa eres y vaya ...
    ... ojazos verdes!
    
    - Tú sí que eres guapa -contesté.
    
    Estuvimos juntas como tres horas hablando. Yo ya le había contado que lo iba a dejar con mi pareja porque no estábamos bien.
    
    - ¿Sabes Vicky? -así la llamaba yo- Hoy voy a romper con ella -le dije.
    
    - ¿Y por qué hoy? -me preguntó.
    
    - Pues porque hoy tengo un motivo más. Es que ya no la quiero y además me gustas mucho y no quiero serle infiel - contesté.
    
    - Tú también me gustas pero no quería decir nada porque ya tenías a alguien -me dijo ella.
    
    Cuando nos despedimos, yo ni corta ni perezosa la besé, ella me devolvió el beso. Fuimos un poco más allá; yo metí la lengua en su boca y ella hizo lo mismo. Al sentir el contacto, un escalofrío recorrió mi cuerpo; yo quería más y la abracé mientras seguía besándola. Estábamos cerca de donde había aparcado porque yo la había acompañado hasta allí, así que Vicky me empujó contra el coche y me metió la lengua en la boca buscando la mía. Yo la agarré por las nalgas pegándola más a mí; ella gimió en mis labios y subió una mano hasta uno de mis pechos llegando a encontrar mi pezón debajo del sujetador, haciendo que me estremeciera. Con su pierna izquierda me abrió las piernas rozando con su muslo mi sexo, ella empujó para hacer más presión y yo la agarré más fuerte del culo.
    
    La cosa se quedó así; no pasó nada más porque las dos teníamos que trabajar. Así que quedamos para el fin de semana. Yo ya estaría soltera y no tendría ningún problema para llevar a Vicky a mi casa porque mi ...
«1234...»