1. Mi maestra de Naturales


    Fecha: 17/07/2020, Categorías: Anal Tus Relatos Autor: Queve, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... ejercicio, cuando vi su piel morena clara, observé el contorno de sus homóplatos y una línea bien definida en su espalda, que bajaba hasta su trasero redondo y firme.
    En su vientre también se formaba esa línea con bello fino que se escurría hacia abajo.
    Ella me bajó los pantalones con todo y calzón, deleitada y complacida por el tamaño de mi pene, se lo metió a la boca como un pan de dulce hasta el fondo de su garganta y cuando lo sacaba, lo hacía presionandome suavemente con sus labios y su lengua masajeaba la parte interna de mi venudo pene, no tardando mucho en querer venirme. Cuando la maestra sintió mis espasmos y mis gemidos, me lo hizo con más fuerza e intensidad hasta que gemì descontrolado. Al mirar hacia abajo, la vi a ella con su boca abierta y mirándome a los ojos con un gesto de súplica, muentras masturba fuerte mi pene sobre la punta de su boca, esperando todo mi blancuzco líquido, ya no pude más y sentí como todo mi semen recorrió su trayecto desde adentro de mí, hasta eyacular en su boca y cara, embarrando su cabello, ojos y orejas, mientras se pasaba mi pene por toda la cara y me succionaba hasta la última gota de semen.
    yo estaba extasiado, echado en la cama con las piernas abiertas, mientras ella frotaba su vulva,  me miraba y traga los restos de mi semen, que habían resbalado de su boca al pecho. Me levante y la besé probando mi propio semen de su boca eso me calentó mucho, le bajé los pants que traía puestos y su bikini estaba empapado y su vagina ...
    ... totalmente resbalosa. Yo no sabía bien por donde se la tenía que meter, pensaba que era por el culo y sólo en la posición de a perrito, así que la empine y se la puse en el ano y traté de meterse la por ahí. Casi bota la carcajada y me dice, espera, espera...me la quieres meter por ahí? preguntó curiosa, yo respondí que sí!
    Me dijo espérate, recostándose en la cama mientras abría las piernas con entusiasmo.
    Me hizo señas con su dedo invitándome a ir a su encuentro, dame una mamada como la que te di yo; en ningún momento mi pene perdió fuerza, me puse sobre ella con mis manos separando sus rodillas y me inauguré en el arte del sexo oral..
    yo me concentraba en su orificio vaginal,  pero ella me indicó que lo debía hacer en el clítoris suavemente, describiendo círculos con mi lengua y lenguetazos en forma de látigo, que chupara a sus labios y que le mordiera sus muslos e ingles.  Así comenzó a gemir y a presentar espasmos, moviendo cada vez más sus caderas de arriba abajo mientras aprisionaba mi cabeza con sus manos y piernas.
    Me acordé de aquel sueño que tuve, donde yo le hacía sexo oral y me sorprendió lo certero que fuí en adivinar o suponer a lo que sabría y olería y cómo se sentiría su carnita en mi lengua...era casi igual!
    Totalmente excitada, se incorporó y me tumbó sobre la cama, se volvió a meter mi pene unos segundos en su boca, dejando escuchar esos sonidos de succión y se montó sobre mí.
    Contemplé su cuerpo encima del mío, mientras una sensación caliente y ...
«1...345...»