El callejón - Relatos Eróticos

El callejón

... levantó mi mirada con un rostro de miedo, y entonces veo su mirada, su rostro, una cara llena de lágrimas, algo despintada de los ojos de tanto llorar, ni siquiera estaba molesta, solo me miraba esperando que yo dijera algo, yo no digo nada, no me sale ninguna palabra solo me levanto lentamente y me dirijo por mi almohada, ella solo se me queda viendo, y cuando tomo la almohada me dice con voz firme " oye yo estaba sentada ahí" a lo que yo contesto " bueno lo que pasa es que esto es mío" , ella queda como algo desconcertada, se dirige hacía mi con rapidez y cuando pienso que le dará un golpe me cubro el rostro con rápidamente, ella me dice " tranquilo solo voy a tomar mi celular", la vergüenza se apodera de mí y le pido disculpas, ella decide voltear y retirarse, pero a medio camino decide mirar hacia mi otra vez, y con media sonrisa da un pequeño grito, "es un buen lugar! buen aire" (señalando el aire acondicionado), yo sonrió y solo doy las gracias de una manera tan apenada que seguro nadie en el mundo las escucho. 
Esa noche me quedé pensando, que le habrá podido pasar a la pobre joven, pero decido estar más precavido la siguiente vez, tendré también algún tipo de protección, gas pimienta o algún palo que me sirva al menos para darme tiempo de huir si algún maleante se acerca. Pasaron dos días y yo no había ido a mi escondite, como el fin de semana me abordo, fuimos con la familia a casa de la abuela, yo seguía pensando en la chica, en qué le pudo haber pasado, porque ...

... lloraba, o que motivo tendría para llegar a mi callejón. Cuando por fin el día un día apto para ir a mi callejón, mi madre decide prender el aire, que disque ameritaba el día, no tenía ninguna buena excusa para ir, así que por ese día decido posponer mi lugar de descanso, para el medio día siguiente me dispongo a irme, tomo mis artículos necesarios y me dirijo hacia el callejón, entro y casi corriendo llegó a mi pequeño sitio detrás del contenedor, cuando logro llegar mi mirada se sorprende totalmente, la chica estaba ahí, yo solo abro la boca para dar una impresión más clara de mi asombro y ella solo sonríe, ninguna palabra sale de mi boca, ella da el primer paso y me dice " creí que estarías aquí diario", yo en tartamudo  intento explicar que no pude venir en los días posteriores pero ninguna frase la completaba, ella se rie y me pregunta  ¿no pasa nada si compartimos el callejón o si? Yo a como pude solté un no, y ella asintiendo con la cabeza decide quedarse ahí sentada, yo siendo de lo más evidente me quedo parado sin saber que hacer, ella nota la incomodidad y nuevamente es quien toma la palabra " todo bien? Sientate o has lo que quieras hacer, ¿Es nuestro callejón no? " Sin poder decir una palabra caminó lentamente hacia un lugar algo retirado a ella y me siento, ni siquiera saco mi celular, solo me quedó mirando, sin entender que pasa, mirando fijamente hacia la pared de enfrente, solo transcurrieron unos segundos y yo sentía una eternidad, en eso escucho nuevamente los ...