Las mujeres de mi flia. politica (4) - Relatos Eróticos

Las mujeres de mi flia. politica (4)

... jugando?
--Creería que sí. Ahora que tu mami ya es nuestra cómplice! Jajaja
--jajaja tenes razón tio….me gusto cuando mami se vino. Me dio cosita en mi puchita! Tengo que esperar mucho tío para que me metas tu pito??
--Un poco bebe, ya veremos
--Te lo puedo chupar, tío
--Si amor, necesito que lo hagas…
No espero más. Se sacó su bombachita y se trepo a mi cuerpo.
--mmm..tío. ¡Que ricos son los jugos de mami!!! ¿Te gusto hacérselo?
--Mucho amor. El tío las quiere a todas por igual, mi cielo.
Como había aprendido en las ultimas 48 hs, dentro de sus limitaciones por la capacidad bucal, obvio. ¡Pero que bien chupaba la verga esta pequeña nenita!
De pronto dejo de chuparlo y se trepo más, montada en mi cuerpo. De manera que su conchita frotara el tronco de mi verga.
--Que rico tío! No veo la hora de meterla toda adentro.
La abrace e hice que apoyara el tronco de su cuerpo contra mi pecho mientras seguía montada, de manera que su colita quedo en pompas, bien paradito y abierto. Mis manos se deslizaron hacia allí. Ella seguía frotándose y gemía. Mis dedos recorrieron el canal de su cola. Moje con sus propios jugos me dedo meñique y comencé a frotar su apretadito culito.
--Ay tío que rico!...—te gusta bebe?...decime si te molesta o te duele!
--Me gusta tío. Me da tironcitos en mi puchita.
Mojé más mi dedo y comencé a presionar sobre su anito. Sentía en la yema dl dedo como comenzaba a dilatarse y presione más.
--Ay ay ay tío…--duele?—no. Se siente raro. ¿Me estas ...

... penetrando?
--Si amor. No lo puedo hacer con mi verga, pero eso no significa que no pueda enseñarte que se siente teniendo algo adentro.
--Me gusta tío…seguí
Ya la primera falange de mi dedo meñique estaba dentro de su culito, lo entraba y sacaba y ella acompañaba mis movimientos con sus caderas. Lo que hacía que me frotara más rico mi verga, que estaba entre sus labios vaginales, su pancita y la mía. Me estaba haciendo gozar casi al límite de acabar. Cuando sentí que su ano se dilato bastante, cambie de dedo. Le introduje el mayor.
--Ahggggg…tio. Eso dolió—dijo incorporándose para volver a quedar sentada.
--Lo saco?...—no tío, por favor, déjalo.
Deje mi dedo quieto, era ella quien cabalgando sobre mi penetraba. Cada vez lo hacía más fuerte y más rápido. Prácticamente se elevaba y se dejaba caer sobre mi dedo. Era todo un espectáculo.
--Ayyy tío que rico…ahora sé lo que siente la abu…que rico tener metido algo en la colita…ahahahhhhhh…--e iba incrementando la velocidad y la ferocidad. Era increíble cómo se transformaba esa pequeña criatura en una yegua gozando.
--Que rico dedo tío….quiero que me lo hagas siempreeee. Te quiero, te quiero..aahhhhhahahhhhh…me hago pis tío me hago pis…ahahahhhhhhhhhagahaghha…
Y dejo caer su pequeño cuerpo sobre mí. Agitado, sudoroso y con pequeños espasmos. Cuando estaba sacando mi dedo de su culito, escucho la voz de mi suegra en la puerta del cuarto…
--Viste lo que fue eso? ¿no tenes ganas ahora de meterte en el medio y gozar?...bueno, eso ...