Terminaron dándome por el culo en las duchas de los vestuarios.
Fecha: 03/12/2020,
Categorías:
Gays
Tus Relatos
Autor: Anónimo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
Mientras me estaba calzando, pude ver a Rafa totalmente desnudo. Joder, pedazo de polla que tenía el cabrón, no es que fuera enorme, sería aproximadamente de unos 16 centímetros, lo que me llamó la atención además de lo bien formada que tenía la polla, eran los huevos. La hostia, le colgaban un montón. Quedé mirando medio hipnotizado, cosa que él vio perfectamente como le miraba. No dijo nada, pero vio como mi cara se enrojecía, empezando a ponerme yo nervioso, No sabiendo para donde mirar.
En el bar donde paraba algunas tardes, tenían una peña de fútbol. Solían ir a entrenar 2 días a la semana, lo hacían en un colegio, en un pequeño campo de fútbol. Iban todos los martes y jueves sobre las 8 de la tarde. El entrenamiento se trataba de jugar un partidillo de fútbol entre ellos, unas veces eran más, otras menos, pero casi siempre se llegaban a juntar unas 18 personas.
Las edades de la mayoría rondaban entre los 37 o 38 años, aunque había algunos que rondaban los 50, y un par de ellos que estarían entre los 29 o 30 años.
Los que llevaban todo, eran 2 clientes y amigos del dueño del bar, se que uno de ellos trabajaba de conserje en el colegio, fue por la mediación suya el conseguir poder entrenar en aquel colegio. Ambos eran amigos y se llevaban muy bien.
Un día que les faltaba bastante gente, el que llevaba todo, me invitó a ir con ellos. Al principio le dije que no, que además no tenía ropa. No gracias, yo al fútbol soy muy malo, no es lo mío, además, ...
... aunque quisiera, no tengo ropa para poner.
Va, tú tranquilo, nosotros tampoco somos profesionales, solo se trata de jugar un partidillo entre amigos. Además, hoy somos muy pocos, nos vendría estupendamente que vinieras. Por la ropa no te preocupes, en la bolsa de deportes tengo ropa para varios.
Sí, pero es que, aunque quisiera, tampoco tengo calzado, y no voy a jugar con los zapatos.
Si es por eso no te preocupes, Fernando tiene botas en el colegio, me decía mirando para mis pies. No tienes problema calzas más o menos el mismo número que yo, y Fernando tiene de mi número y varios más.
Venga, anímate y ven con nosotros, me decía.
Tanto me insistió que terminé por aceptar. Además, así pasaba un rato entretenido. Está bien, pero mira que no tengo nada, ni siquiera tengo con que ducharme.
No te preocupes, yo llevo de todo, por eso no vas a tener ningún problema.
De esa manera aquel día fui con ellos a jugar el partidillo de fútbol.
Yo iba en el coche con Rafa, que era el que organizaba todo, y era el que me había liado. Nada más llegar al colegio, fue en busca de Fernando para que me dejara unas botas. Mientras tanto yo esperaba allí sentado en los vestuarios viendo cómo se cambiaban los demás componentes del grupo.
Estaba allí sentado esperando, y ya me estaba arrepintiendo de haber aceptado. Como hostias me había dejado liar, pensaba, viendo aquellos cuerpos desnudos. Además, que a la mayoría no los conocía, solo a unos ...