Al final se lo dije.
Fecha: 18/12/2020,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
-¿Quién es la que tiene el bebé? Ahí, cuando toman mate en la vereda.
-Ah, mi cuñada ¿por?
-¡Mamita! ¡Qué tetas! Ayer pasé y estaba dándole de mamar y cuando me vio que iba hacia allí se sacó la otra y cambio al bebe de pezón. Se la vi toda ¡es grandiosa!
-¡Ja ja! ¡Te gusta!
-¡Esta buenísima!
-Bueno… vos también le gustás.
-¿Cómo sabés?
-Porque me lo dijo. Un día me preguntó ¿y qué hacés con tu patrón eh? Seguro que te lo montás ¿no?
-¿Se lo dijiste?
-No, no le dije nada, pero lo supuso. Y me dijo está bueno ¿no?
-¿Que le dijiste?
-Nada, me hice la gil, pero seguro se dio cuenta. ¡No lo negué!
-¡Uy dio! A ver si se arma quilombo.
-No, no pasa nada. Nadie se va a enterar.
-¿Y si le cuenta a tu marido?
-No, que le va a contar, si ella también se acuesta con otros varios, y ella sabe que lo sé y nunca dije nada.
-Bueno, es mejor que sea así.
-¿Querés que le diga que venga? Cuando venga yo, me “hace compañía”, una visita, nadie va a sospechar.
-¿Te parece?
-¿Qué problema hay? ¿Vos tenés problema?
Yo le comenté lo de las tetas justamente para llegar a algo así, pero no imaginé que Leo quería participar.
-No, para nada, pero no sé, no quiero lio.
-Si se acuesta con vos, mucho menos va a hablar.
-Con vos la paso fenómeno y vos también ¿no?
-Si, claro, pero si viene no tengo problema, jugamos los tres, total yo sé que te tengo para mí el resto del tiempo.
-¿Y cuándo?
-Le digo para la próxima semana ¿te parece?
-No hay tanto apuro. –Algo tenía que ...
... simular.
-¡Dale, nos vamos a divertir!
Leo estaba más ansiosa que yo.
Como estábamos en la cama y ya nos habíamos echado un polvo era el momento oportuno para otro. Mientras estábamos hablando yo le hacía caricias en la concha, le metía los dedos y lo “remojaba” en mi semen mezclado con sus propios jugos. Leo usaba un DIU muy seguro según ella, pues lo usaba con su marido desde su último hijo y siempre le dio resultado. Mientras tanto ella me pajeaba suavemente, por lo que estábamos listos los dos. Leo me montó y se metió ella misma la pija en la concha y rápidamente comenzó a cabalgar riéndose.
-¡Vas a ver cuando seamos los tres! ¡Ja, maravilloso!
Le encantaba cabalgarme. Decía que de esa manera podía tener dos o tres acabadas antes de que me viniera, lo que lo hacía más divertido. Y fue así nomás. No creo que pasó más de un minuto y tuvo su primer orgasmo. Por suerte yo tardaba un poco más y podía ella llegar al tercero.
Y hablando de tetas me dio ganas de hacer una cubana. Leo también las tenía grandiosas… ¡y podía venir con premio! Luego de tener el tercer orgasmo le dije lo que quería.
-¡Ah picarón! ¡Querés practicar!
-Para estar entrenado. ¡Van a ser cuatro tetas geniales!
-¡Ja ja! ¡Querés andar en cuatriteta!
Me encantan las pajas cubanas. Ver como la pija aparece y desaparece entre las tetas es algo especial, y además tocarle la pera con el glande es una exquisitez.
¡Ahora sí que quería acabar! ¡Y tener el premio!
Cuando sentí el sudor frio que me ...