1. LA MENOS PENSADA


    Fecha: 27/12/2020, Categorías: Hetero Tus Relatos Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... cuenta me di. – Eso suponía gran “futuro”. No lo dejaría pasar.
    	Realizamos los trámites necesarios. Firmamos lo que hubiera que firmar…, y de pronto me di cuenta que Adriana había terminado… y me esperaba! 
    -¡Bueno, al fin! Gracias por esperarme.
    -No quería irme sin saludarlo Daniel. Ha sido usted muy amable. Su idea de ir al bar hizo que el tiempo pasara más rápido que nunca. ¡Tendríamos que ponernos de acuerdo para hacer trámites juntos! 
    -¡Mejor qué eso! ¡Vamos a almorzar ahora!
    -¡Oh, no! ¡Sería aprovecharme de su gentileza!
    -¡De ninguna manera! ¡Yo me quiero APROVECHAR de su compañía! – Y resalté la palabra…
    -¡Ja ja ja! ¡Es usted muy explícito!
    -Solo digo que el tiempo en su compañía pasa rápido. Si hay que trabajar… el tiempo será discreto.
    -¿Dónde vamos? Elija.
    -¿Yo? ¿Por qué no usted?
    -Porque quiero darme el gusto de complacerla.
    -Pero… el que me gustaría está lejos de aquí.
    -No importa, tomamos un taxi y vamos.
    Me dijo dónde. Lo conocía, era bueno, cómodo y discreto. Y lo más importante, y por eso era discreto, a treinta metros hay un hotel de citas. Ella lo sabría, seguro, por eso eligió allí. No hice ningún comentario. No quiero desalentarla ni ponerla en evidencia. Y fuimos. 
    Nos instalamos en una de esas mesas en semi reservados, pedimos y conversamos. Sí de cosas personales. Ambos queríamos conocernos antes de ir a la cama. 
    En buena hora. Una hora y media después, tomando una copa y un café, esperando hacer la digestión para aliviar nuestros ...
    ... estómagos y dejar que la sangre pueda ocuparse de cosas más placenteras, sabíamos bastante de nuestras vidas; por lo menos yo fui sincero. Supongo que ella también; separada desde hace 3 años, no volvió a estar en pareja, solo encuentros ocasionales.
    Y así llegamos a la media tarde…
    -Después de este almuerzo y este vino me dan ganas de dormir…
    -Podemos hacerlo. Aquí nomás hay un hotel (no dije “telo” porque sería demasiado explícito).
    -¿Te parece? 
    -Sería muy bueno. 
    -Vamos entonces.
    	Adriana caminó decidida hacia el telo. Sin la menor duda ingresó. Yo atrás. Como “supuestamente” íbamos a dormir pagué dos turnos. Todavía sin tocarnos fuimos a la habitación designada: 2º piso a la izquierda. La 23; lindo número. Abrí la puerta y me hice a un lado. Adriana sonrió. Cuando paso a mi lado acaricié su brazo y cerré. Adriana giró y me besó muy suavemente. Apenitas un piquito. Respondí igual, pero cuando nos paramos dentro de la habitación la miré muy profundamente y tomé su cabeza. La besé en serio, pero sin lengua. Todavía no. 
    -Querés bañarte?
    -Si, vendría bien
    -Andá. No te molestaré – Le dije sonriendo.
    -Sé que no.
    Y comenzó a desnudarse ante mí. No la toqué ni mostré ansiedad. Quedó en bombacha y corpiño. Entró al toilette y cerró la puerta; producto de la digestión. Tal cual salió sonriente.
    -Ahora mucho mejor. – ¡Era una dama! 
    Fue hacia el pediluvio y abrió la ducha. Como los tabiques eran traslucidos no quise ser curioso o molestarla. Entré al toilette. También ...
«1234...8»