Mis sobrinas Andrea y Natalia (8)
Fecha: 25/03/2021,
Categorías:
Incesto
Tus Relatos
Autor: Fernando Morante, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... increíble de ver, y en lugar de unirme, me volví a dormir.
Una vez más, me desperté para descubrir que Andrea ahora estaba dormida y acostada cerca de Matteo. Su brazo estaba sobre su cuerpo acurrucándose contra él. Los celos golpearon como un ladrillo en la cara. Verlos así me hizo preguntarme si habíamos ido demasiado lejos. Nunca antes habíamos hecho algo así. Ahora mi mente estaba confusa y realmente no sabía qué hacer. La forma en que Andrea se acurrucó con él y la expresión de satisfacción en sus rostros me desgarró el corazón. Las últimas dos noches habían demostrado lo receptiva que era ella con él. Parecía que Andrea estaba totalmente en sintonía con él sexualmente y el sexo que le daba estaba fuera de este mundo. Me tocaba comprender que aquella mujer disfrutaba siendo follada en mi presencia.
De todos modos, era hora de levantarme, así que me dirigí al baño para ducharme y afeitarme. Era lunes y debía trabajar. Llame al restaurante para pedir desayuno para tres personas y que lo subieran a la habitación.
Volví de nuevo a mis pensamientos. Sin duda, todo aquello iba a ser un punto de inflexión importante en nuestro relación. Mis sentimientos esa mañana fueron confusos. Por un lado, disfruté viendo a Matteo follándose a Andrea esa primera noche, y fue una completa revelación. La segunda noche fue aún mejor. Andrea fue asombrosa. Deliberadamente permití que esa segunda noche tuviera lugar solo para ver qué pasaba y cuanto Andrea podría disfrutar siendo ...
... observada por el hombre, que de acuerdo a ella, amaba. Ella me amaba!!!
Por otro lado, no esperaba que Andrea realmente lo hiciera esa segunda noche. Supongo que estaba esperando a que Andrea dijera que ya era suficiente, pero nunca lo hizo. Lo que sucedió ese fin de semana fue que a Andrea le gustó y las ramificaciones de todo fue que nuestra relación nunca sería la misma.
Después de ducharme y afeitarme, regresé a la habitación principal y descubrí que Matteo se había ido. Esa noche era la última de Matteo y tenía que salir del hotel esa mañana.
Andrea todavía dormía. Se había puesto de costado, con el pelo sobre la cara. Me vestí listo para ir a trabajar. Luego me acerqué a ella y le besé el cuello expuesto. Andrea soltó un suave gemido. Olía a sexo, pero no olía igual. Estaba algo rancio o viejo. Y ella llena de moretones, semen en su piel y chupones por varios sitios. La dejé en la cama. Sonó la puerta, era un mesonero que traía los desayunos. Los dejo y se marcho, después que le di una propina.
No podía despertar a Andrea para desayunar, aunque lo deseaba. Quería comentare con ella lo vivido en la noche y aquella madrugada. Pero no era buena idea. Matteo era un hombre insaciable y estuvo cogiendo con Andrea toda la noche. Era difícil entender la energía que tenia aquel ser.
Estaba desayunando cuando la puerta principal se abrió. Era Natalia. Nos habíamos olvidado de ella. Estaba regresando de la disco. Me dijo que tenía hambre y se sentó a comer conmigo. Me ...