El eterno culo de mi mejor amiga
Fecha: 29/03/2021,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: Follet, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... apretó su esfínter alrededor de mi verga que hizo que me detuviera, cuando hubo terminado volví a arremeter con mas fuerza hasta que exploté, un fuerte chorro la baño por dentro.
Mi vista se nubló, arremetí varias veces más para expulsar todo y una vez que terminé así me quedé, jadeando, con los ojos cerrados, sólo sentí los movimientos de sus nalgas de atrás a adelante con mi verga dentro, abrí los ojos, acaricié sus nalgas que se veían impresionantes desde la altura de mi rostro, mi verga volvió a reaccionar y nuevamente empecé a arremeter, esta vez duré más dentro de ella y el chorro final fue más leve.
Me salí, completamente sudado, se dejó caer en la cama, de su culo escurría un hilo blancuzco. Me tendí a un lado de ella, acariciando su espalda, sus nalgas, ella me sonreía tiernamente. Se veía muy hermosa, me sentía un hombre con mucha suerte.
Perdimos la noción del tiempo y cuando recuperamos el aliento se percató de la hora, se levantó presurosa, “tenemos que irnos, me va a matar mi papá”, espera, le dije, estas fiestas duran mucho, todavía no se acaba, no creo que tu papá no lo sepa, tómalo con calma, “pues si, tienes razón, pero sólo un ratito más ¿vale?.
Volvió a acostarse, nos abrazamos y nos quedamos así un buen rato, sin decir nada. Finalmente se levantó, fue al baño y regresó a vestirse, verla como se iba vistiendo, nuevamente me encendió así que ...
... cuando estaba inclinada frente al espejo me acerqué a ella, completamente desnudo, con la verga dispuesta nuevamente, levanté su vestido, bajé las pantimedias con los calzones y volví a probar ese rico culo, era una delicia verla así, arrecha, dispuesta, sin inhibiciones, volvió a venirse y nuevamente me vacié dentro de ella.
Se limpió con pañuelos desechables, se colocó sus prendas y me dijo que nos fuéramos, me vestí rápidamente y salimos, del alcohol que había bebido ya no había rastros así que se puso al volante, iba feliz en el trayecto, me dejó en un sito de taxis y nos despedimos con un beso.
En efecto, no hubo regaño de su padre, si acaso una mala cara.
Los poco más de dos años que duro nuestra relación secreta, nunca pude tener mi verga en su coño, siempre disfruté de su culo, se empecinó en llegar virgen al matrimonio y así lo hizo, terminamos nuestra relación cuando me informó que iba a casarse, cambió de trabajo y de ciudad.
Su coño lo disfruté a plenitud seis años después de su matrimonio en que por casualidad coincidimos en una ciudad vecina por cuestiones de trabajo, estaba más hermosa que antes y conservaba el cuerpo que yo recordaba, salimos a cenar y la invité a mi hotel, aceptó sin remilgos. Por fin pude disfrutar de su coño y de su culo sin ningún reparo, cuando nos despedimos nos hicimos la promesa de volver a vernos, la cual no se ha cumplido.