1. EL ASALTO


    Fecha: 13/07/2021, Categorías: Hetero Tus Relatos Autor: Aquiles, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... vagina, para volver a subir despacio por toda la vulva.
    
    -MMMMM- volvió a gemir.
    
    Para la tercera vez, lo hice distinto. Puse la punta de la lengua en el borde superior de la vulva. Allí podía sentir la parte de arriba su clítoris, que estaba hinchado esperando ser acariciado. Entonces haciendo movimientos laterales con la lengua, recorrí toda la vulva. Por supuesto, cuando pasé por la cabeza del clítoris Mimi se estremeció, pero no me detuve allí sino que seguí bajando, jugando con sus labios vaginales, hasta llegar abajo… muy abajo. Hasta su culito.
    
    Cuando sintió mi lengua sobre su ano, Mimi protestó débilmente:
    
    -Nooo, nooo… ahí nooo-
    
    Sin hacerle caso y sin dejar de hacer movimientos con la lengua, recorrí toda la zona anal para volver a subir poco a poco. 
    
    En la vagina me detuve e inclinándome hacia adelante, metí la punta de la lengua tanto como me fue posible dentro de ella, llenándome de todos los fluidos que salían imparables de adentro de su cuerpo.
    
    -Aaaaahhh- gimió -siii-
    
    Poco a poco había ido abriendo sus piernas y empujándolas hacia arriba y ahora estaba completamente abierta para mi, su vulva expuesta a mis caricias… el placer derrotando su inicial resistencia.
    
    Después de meterle la lengua en la vagina tan adentro como me fue posible, la saqué y subí hacia su clítoris y empecé a acariciárselo con rápidos movimientos con la punta.
    
    -SIIIIII- gimió estremeciéndose toda -no sabiaaa… nooo sabiaaa…-
    
    Abandoné el clítoris y volví a bajar a ...
    ... su vagina, pero ya ella había saboreado la miel del placer que representa las leves caricias de una lengua en el clítoris.
    
    -Nooo, nooo, regresaaa- me pidió. Jalándome la cabeza hacia su clítoris de nuevo.
    
    Pero no regresé inmediatamente, sino que primero volví a introducirle la lengua para luego presionar contra su abertura y subir lentamente hacia el clítoris, jugando con sus pliegues, con sus honduras y cimas.
    
    Entonces solté mi mano derecha y mientras mis labios se apoderaban de su clítoris de nuevo, con mis de dos índices y medio comencé a penetrarla.
    
    -AAAAAHHHH- gimió más duro, mientras sus caderas temblaban.
    
    Cerrando mis labios alrededor del clítoris chupé un poco.
    
    -AAAHHHH- gimió nuevamente, mientras me apretaba la cabeza para que me quedase allí. Lo que hice complaciéndola.
    
    Mientras, mis dedos la penetraron hasta que las coyunturas me impidieron ir mas adentro. Su vagina me los apretaba con fuerza, confirmando la juventud de su cuerpo.
    
    Girando la mano, comencé a buscar el punto G en la cara superior de la pared de la vagina y luego de moverlos un poco, sentí una zona sospechosamente rugosa. Apretándola, sentí que Mimi se estremecía. Eso me convenció de que la había encontrado. 
    
    -¿Queee meee haacees?- pregunto temblando de pasión.
    
    Entonces no le di más respiro. Cada vez con más pasión me concentré en su clítoris y su punto G y en pocos minutos, no pudo más y gritando alcanzó el orgasmo:
    
    -AAAAAAAAAAAHHHHHHH….SIIIIIIISSSIIIII-
    
    Sus piernas ...