Mi mamá me ama
Fecha: 09/08/2021,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... los cabellos.
-No sonsa. Te daré el dinero a vos y vos “la comprás”. ¿Está claro?
Las nenas estaban “arrobadas”…
-Papi… ¡sos un amor total!
-Ahora me voy a bañar.
Fui hacia el baño. Así, desnudo, como estaba. Luego volvería a cambiarme. Me duché y regresé envuelto en el toallón. Creo que las nenas se habían olvidado de mí. ¡Estaban en un espectacular 69!
No las interrumpí. Me quedé un instante mirando. Cami está abajo. Levanta su cabeza para que la lengua alcance la conchita de la hermanita. Miri tiene su cabeza entre las piernas de la hermana mayor. El espectáculo es pura hermosura. No hay suficientes adjetivos para describir tanta belleza. Es un milagro el haber encontrado estas nenas maravillosas. ¡Es un milagro! Nada podría ser mejor en mi vida.
En silencio saqué mi ropa y me vestí en la sala…, y me fui…, cerrando la puerta silenciosamente.
Tenía la intención de estar, por lo menos, una semana “tranquilo”…, quiero decir sin “visitas” a nadie. Solamente dedicarme al trabajo y a Araceli. Ya bastante tuve desde que volví de vacaciones y Ari sabia a quienes había “visitado”…, excepto las nenas. Supondría que a Yolanda, o a Lorena, o a “las tías”… Pero no quería pasarme de mambo. Tranqui, tranqui…, se llega lejos.
Así que hasta el martes de la semana siguiente llegué “impoluto”. Hubo varios llamados…, descartados por el trabajo. El pretexto era que durante las vacaciones se habían desmadrado varios temas…
Y llegué milagrosamente hasta el viernes sin sobresaltos. ...
... ¡Y se acabó la paz!
Viernes, a las once de la mañana, más o menos, recibo un llamado… No estaba en mis contactos.
-Hola.
-¡Hola Dani! ¿Cómo estás? ¿No me reconoces? ¡Soy Kirky!
-Ehhh… ¿dónde estás?
-Aquí. Seguro que cerca de vos…
-¿Cómo? ¿Terminó la temporada?
-No, renuncié.
-Pero… ¿por qué?
-Pues…, bueno… luego te cuento.
-¿Así? ¿Cuándo?
-Ahora, dentro de media hora… - ¡Zas! ¡Esta llamó a Araceli y va para casa!
-¿Cómo media hora?
-¿Podés estar en media hora en el Café del Suizo?
El café… ¡El mismo donde íbamos con la mamá!
-Pero…
-Si… dale, estoy segura que en media hora podés estar. De cualquier manera te espero.
Pensé que es mejor que la viera allí, antes que en casa.
-Está bien. Trataré en llegar.
-Si tardás más no importa. Te espero. ¡No fallés!
-Bueno. Te corto para preparar algunas cosas en la obra, y voy para allá.
En realidad no tenía que preparar nada. Tenía que pensar… ¡ma’sí! No iba ir en el auto. ¡Tardaría dos horas! ¡Y otras dos buscando estacionamiento! Tomé un micro para acercarme al subte, y fui. ¿Qué otra cosa iba a hacer? Veremos que quiere… Seguro que habrá algún nuevo kilombo. Aunque en el resort se portó muy bien… Demasiado bien…
Mientras viajaba, pensé que seguramente Adriana le dijo que nos encontrábamos allí cuando íbamos a la dirección de construcciones. ¿Querría revivir las horas que tuvimos juntos con Adriana? ¡Qué se yo! Esta Kirky es medio…, bueno…, no sé…
Cuando llegué, un poco más tarde, Kirky se levantó en cuanto entré, ...