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41.1 Rafael dulce compañía
Fecha: 30/01/2018, Categorías: Grandes Relatos, Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos
... cuenta de la influencia que ejerce Gonzalo sobre mí, su fría seguridad, sus dotes de mando, su dureza envuelta en guantes de seda, su amabilidad que me vuelve confiado. Tiene una forma de ser que envuelve como una tela de araña a la mosca, hilos tan finos y delicados que parece imposible que puedan servir para ser una prisión, pero cuando se convierte en red de muchos hilos puede causar el ahogo. Resulta una forma sutil y subliminal de atrapar, y lo más curioso es que resulta para mi deseable. Me gusta la sensación de verme sometido a él, aunque a veces me revele, pero también siento temor. No necesitaba mucho tiempo para comer, quería ir a ver el lugar del accidente con André, también a él le veo preocupado, pero al menos no ha resultado mortal y eso libera el alma de alguna manera. Estaba deseando que llegara la hora para llamar a Gonzalo, estaba comenzando a sentirme dependiente de su voz y era una forma de sentir sus sentimientos y expresarle los míos. En esta ocasión se adelantó y recibí su llamada antes de que le llamara yo. -Daniel cariño. –era tan bello como comenzaba a hablar, desde su saludo inicial me sentía emocionado, a veces me parecía resultar cursi y afeminado en mis respuestas, usaba palabras tiernas que con otros no me apetecía pronunciar. -¡Hola!, mi amor te iba a llamar ahora. –y podía quedarme treinta minutos o una hora escuchando sus palabras, y sus silencios que también me susurraban palabras. Lo único que no me gustaba era cuando ...
... hablaba de cosas tristes del pasado, precisamente lo que quería olvidar. ------------------------------- Cuando Rafael me vio llegar debió notar mi cansancio, me quitó la bolsa de deporte y me llevo a la cafería donde pidió un té para mí, hacía frío o yo estaba destemplado. El día había sido muy movido y tuve que soportar momentos de tensión muy fuertes. André me ordenó que acompañara a la autoridad laboral en su inspección del accidente, revisar si se había cumplido toda la normativa laboral, interrogar a los testigos y analizar la documentación para encontrar antecedentes de otros accidentes similares. Me pareció correcta el acta que levantaron y así se lo comuniqué, él no estuvo conforme hasta que lo miraron en el departamento jurídico, ratificaron mi opinión, no se podía decir otra cosa más que la verdad. No pude ir a comer y solamente tuve unos minutos para llamar a Gonzalo. Cuando me senté en el coche para ir de compras antes de la natación suspiré aliviado, necesitaba un cambio de actividad urgente. Mientras tomábamos nuestras bebidas hablamos y le conté el porqué de mi estado de ansiedad y agotamiento. -Tú también pareces preocupado y eso lo veo raro en ti. –acaricié el dorso de su mano. -Lo mío no tiene importancia y se arregla fácilmente nadando. Vamos para allá. –se levantó con las dos bolsas en su hombro y no tuve más remedio que seguirle. No podía ser que estuviera mucho tiempo sin ser él, y cuando encontró algún muchacho con quien ...