Luis, Jacobo y un verano 23 Asaf come mi culo
Fecha: 07/02/2018,
Categorías:
Gays
Autor: Alvaro-L-de-H, Fuente: SexoSinTabues
... tanto te gusta chupar, pero hay otras, no solamente en chicos jóvenes, hay algunos mayores que están mejor, tú no te preocupes. –todo esto me lo decía sin dejar de besar mi cara llegando hasta el borde de mis labios, parecía cohibido y recatado y no querer llegar a más. Sí, sin duda no conocía a Iván, a un hombre tan bondadoso. -Vamos a relajar esos hombros y luego verás al mundo de otra manera. –me sujeto por la cintura y me levantó del asiento, sentí que tenía mucha fuerza a pesar de ser delgado. Me acompaño sin soltarme hasta la camilla y me quitó la camisa sin mangas que llevaba dejando solo mis mallas. Me sentó en la camilla y me ayudó a dejarme caer sobre ella, luego me giró para quedar con la espalda hacía arriba. Con Iván era muy fácil hacerlo todo, no suponía esfuerzo y me ayudaba en cualquier movimiento. Sus manos eran duras pero suaves cuando pasaban por mi espalda frotando con algún aceite también oloroso. No me dormía para seguir sintiendo las sensaciones placenteras de sus manos masajeando mi cuello, los hombros, la espalda, apretando a veces y otras suave. -Voy a bajarte las mallas para tratar los músculos de las piernas. –pensé en que no llevaba nada debajo de las malla, pero que importaba que Iván me viera desnudo. No me bajó las mallas, sentí que salían por mis pies a la vez que los calentadores de lana. Comenzó a masajear mis pies, las piernas y siguió subiendo por mis muslos hasta llegar a mis redondas nalgas, todo era un sueño y me sentía flotar en las ...
... nubes, sentía una tranquilidad inmensa, cuando apretó mis nalgas instintivamente las abrí para dejarle que metiera sus dedos como quería. -¡Ahhh! -suspiré suavemente cuando sentí que sus dedos llegaban a mi anito y lo frotaba con el aceite logrando que quisiera que no se detuviera. -Atiéndele tú las piernas. –escuché hablar a Iván y levanté la cabeza para ver que ahora también estaba allí Asaf, cerré las piernas, estaría viendo también mi culito desnudo y expuesto. -Tranquilo bebé, no pasa nada, Asaf ha venido a ayudarme, ahora estarás mejor con cuatro manos dándote el masaje. –la voz suave y persuasiva de Iván lograba calmarme de nuevo, no era tan malo que Asaf mi viera también desnudo. -Ahora te vamos a dar la vuelta para ver ese pecho. -así lo hicieron, ahora podían ver mi verga y mis testículos pero ya no importaba, llegado a ese instante solo quería seguir sintiendo sus manos envueltas en el aceite mágico pasando por mi cuerpo. Asaf elevó mis piernas tirando de ellas para llevarme al borde de la camilla, abrí los ojos y las tenía abiertas del todo, mi verga estaba dura, empinada, apuntando a las lámparas del techo. -Sujétele tú las piernas. –entonces por detrás de mi cabeza me cogió por los pies Iván, tiró pasándolos más allá de mi cabeza y arqueando mi cuerpo dejándolo sustentado sobre mis hombros. No sé cuando había pasado pero Iván estaba desnudo a mi costado, sujetando mis piernas por encima de mi cabeza con su brazo, el glande de su polla estaba a un milímetro de mi ...