1. Fresita, la Lagarta, la Bicha y yo


    Fecha: 07/02/2018, Categorías: Hetero Autor: Quique., Fuente: CuentoRelatos

    ... mamársela, la beso. Después del beso, Fresita, abrió la blusa, cogió su teta derecha y se la llevó a la boca. La Lagarta le hizo lo mismo que le había hecho con la teta izquierda, luego metió su mano derecha dentro de las bragas de Fresita.
    
    -¡Cómo estás! Se puede nadar ahí abajo.
    
    La Lagarta masturbó a Fresita mientras le chupaba las tetas y le comía la boca. Fresita, no esperó a que La Lagarta le quitara las bragas, se las quitó ella misma. Eran blancas. Después, desatada, y comiéndole las tetas a la Lagarta, le dijo:
    
    -Estoy tan cachonda que si no me corro me da algo.
    
    La Lagarta le levantó la cabeza poniendo un dedo en su mentón. Le dio un pico en los labios, y mirándola a los ojos, le dijo:
    
    -Lo sé. ¿Quieres correrte ya o quieres que te haga sufrir?
    
    Fresita le metió un morreo a La Lagarta, y después le respondió:
    
    -Quiero correrme ya.
    
    La lagarta quitó los dedos mojados del coño de Fresita, le acarició con ellos el clítoris y le dijo:
    
    -Pídeme que te coma el coño.
    
    -Cómeme el coño.
    
    -Pídemelo por favor.
    
    -Por favor.
    
    Se besaron.
    
    -¿Por favor, qué?
    
    -Por favor, cómeme el coño.
    
    -¿Después me lo comerás tú a mí?
    
    -Síííí.
    
    -Dime que serás mi puta.
    
    -¡Ooooh! Seré tu puta.
    
    -Dime que serás mi loba.
    
    -¡Aaaaay que me corro!
    
    La Lagarta dejó de acariciar el clítoris.
    
    -Dímelo.
    
    -Seré tu loba, tu puta, tu amor, tu esclava, seré lo que tú quieras que sea. ¡Hazme correr!
    
    Le volvió a acariciar el clítoris.
    
    -¿Me comerás el ...
    ... culo?
    
    -Si.
    
    -¿Me lo follarás con tu lengua?
    
    -¡Aaaaah! Te follaré con mi lengua el culo, el coño, te follaré y te comeré lo que quieras. ¡Lo que quieras!
    
    -¿Preparada para correrte?
    
    -Síííí.
    
    La Lagarta metió su cabeza entre las piernas de Fresita, le metió un dedo en el coño, lo sacó y, humedecido, se lo metió en el culo, después le comió el coño... Fresita estaba tan, tan, tan excitada, tan, tan, tan cachonda estaba, que antes de un minuto, gimiendo, le dijo a La Lagarta:
    
    -¡Ay, Gloriña, ay Gloriña, ay Gloriña que me corro. ¡Qué me corro, Gloriña! ¡Gloriña que me corro! ¡¡¡Me cooorro!!
    
    Yo estaba de rodillas, mirándolas, sacudiendo la polla, con el culo en pompa, y a punto de correrme otra vez, cuando sentí un tremendo golpe en el trasero. Bajé rodando la ladera de la cantera y fui a parar al lado de Fresita y de La Lagarta. El transistor se encendió solo. Recuerdo que se oyó la canción Can the can de Suzi Quatro. Lo apagué. Miré para donde estaba antes de caer rodando y vi a Benitiño, el carnero de Fresita, el cabrón estaba mirándome con cara de mala hostia. Con el culo dolorido, le grité:
    
    -¡¡¡Hijo de puta!!!
    
    Miré para La Lagarta. Parecía una vampira, sólo que en vez de sangre tenía jugo de la corrida de Fresita en sus labios, en su cara y en su cuello. Me estaba echando una mirada asesina. Fresita estaba como muerta. Había perdido el conocimiento con el gusto que sintiera. Tenía su coño peludo al aire. Vi cómo se abría y se cerraba y como seguía saliendo ...
«12...91011...19»