Mi hijo me ayuda a curar las heridas
Fecha: 21/02/2018,
Categorías:
Grandes Series,
Autor: tranque, Fuente: CuentoRelatos
Quiero relatar una historia muy particular que modificaría la relación entre mi hijo y yo.
Me llamo Elena, tengo 39 años, estoy divorciada desde hace ya cinco años, vivo con mi hijo en un departamento amplio que nos da cierta comodidad e intimidad en nuestra relación, trabajo y mi hijo estudia por lo cual nos vemos prácticamente para la cena. Él se llama Fernando, lo llamo Fer y practica deportes desde joven, aunque todavía lo es, ya tiene 20 años, estuvo de novio hasta hace unos meses, pero rompió con su novia, aunque no me cuenta nada, es reservado o tímido y yo lo respeto.
Yo trabajo mucho en la semana, aunque me hago tiempo para entrenar mucho y poder mantener mi cuerpo, cosa que lo logro con facilidad, me gusta cuidarme, uso cremas y me depilo totalmente, costumbre que tenía de antes de casada y mantengo. En cuanto al deporte, cuando no es de gimnasio prefiero andar mucho en bicicleta, con la cual hago muchos kilómetros casi siempre con una amiga que también es vecina, nos conocemos muy bien y nos hacemos compañía.
Llegando al verano coincidimos las vacaciones del estudio de mi hijo y yo la de mi trabajo, ello nos ayudaría a pasar más tiempo junto. El primer día de vacaciones decidí pasarlo con mi amiga recorriendo varios kilómetros en bicicleta ya que ella se iría unas semanas lejos de la ciudad, tomamos un sendero de un bosque cercano que rodea la ciudad pero que no conocíamos mucho, todo iba bien hasta que al pasar por una loma cerca de un pequeño ...
... barranco caigo de repente y ruedo hacia abajo unos metros, con muy mala suerte sobre una montaña de escombros entre los cuales había hierros de una construcción. Por el accidente me lastimo varias partes del cuerpo, pero principalmente las dos manos con las que me apoyé en la caída y parte de los antebrazos. Mi amiga me trato de ayudar, pero tuvo que llamar a emergencia, la cual me rescató y llevó al hospital de la zona. Quedé internada y con las manos vendadas a causa de los cortes profundos. Mi amiga llamo a mi hijo quien vino desesperado por no saber la gravedad del accidente y se ofreció a acompañarme en la internación que duraría sólo unos días, pero se ofreció mi amiga por lo menos dos días a cuidarme ya que tenía planificado el viaje, cosa que la hacía sentirse con culpa. Yo le decía que no se preocupe que mi hijo se encargaría y que yo podría manejarme sola en mi cuidado.
Los dos primeros días pasaron rápido y mi amiga hizo todo lo posible por cuidarme, me ayudaba a higienizarme complementando el trabajo de las enfermeras. Luego mi amiga se fue y tendría que quedarme dos días más internada donde me ayudaría Fer, mi hijo. Estando acostada en la habitación él me ayudaba en alcanzarme la comida y me lo daba en la boca, luego las enfermeras se encargaban del resto, cuando mi hijo salía de la habitación por pudor.
Pasaron cuatro días más y me dieron el alta médica, tenía golpes en todo el cuerpo que, aunque me dolían me dejaban caminar, las enfermeras en el hospital se ...