1. El ascensor


    Fecha: 28/03/2018, Categorías: Anal Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... Diosss que gusto – Pensó Susana- Este tío tiene un verdadero demonio en los dedos- Al cabo de un rato casi se había olvidado del dedo que tenía metido en el culo. El hombre lo hundió un poco más y pronto lo tuvo enterrado entero. Suavemente inició un leve movimiento de penetración. Se notaba que iba con cuidado, y es que ciertamente el esfínter de susana era diminuto, sobre todo en comparación con sus nalgazas rotundas y musculosas. Susana tuvo que reconocer que era placentero. Así que decidió dejarse hacer un poco más. A fin de cuentas ya antes de perder su primera virginidad había dejado jugar a varios chicos con su coño dentro de ciertos límites. Esto no era muy distinto. Entre las caricias que se iban alternando entre su sexo y sus tetas y la lengua y el dedo que no dejaban de jugar con su esfínter no tardó en estar otra vez totalmente mojada. Pablo usaba los líquidos que rezumaba el sexo de Susana para lubricar aún más el ano de la mujer. Parecía leer su cuerpo perfectamente y cuando notó por lo ronco de su respiración y gemidos y las primeras contracciones de su coño que estaba otra vez al borde del orgasmo paró con sus caricias. La excitación anal -Tuvo que reconocer para ella misma- había resultado ser de lo más satisfactoria.
    
    - Qué haces, cabrón!??? No me dejes así ahora! Continúa. Acaba!!
    
    - Si insistes…
    
    Demasiado tarde otra vez y esta vez ofuscada por la frustración del orgasmo interrumpido tardó en reaccionar cuando el hombre colocó su cipote a la ...
    ... entrada de su culo y presionó suave pero contundentemente contra él hasta dejar enterrada la cabeza de su polla en el culazo de Susana. Por segunda vez esa noche se quedó confundida y paralizada. No había esperado que fuera a ser tan fácil!! Esperaba algún tipo de aviso o reacción de su cuerpo ante la invasión anal, pero de repente estaba con un cipote en el culo. Ese cabrón lo había vuelto a hacer! Se iba a volver a salir con la suya!! Esta vez sí que no!! Nadie le iba a romper el culo y menos en un ascensor como a una colegiala estúpida!! Tenía que escapar de esta penetración!! Pero las posibilidades de movimiento eran muy escasas. Su cabeza casi estaba tocando la pared del ascensor y el espacio diminuto sólo le permitía moverse hacia atrás. En perspectiva era obviamente un movimiento absurdo. Tal vez la suavidad con que Pablo había empezado a meter su polla en el culo de Susana había hecho confiar a la mujer demasiado en cuanto a lo doloroso del proceso. En todo caso la ira es una mala consejera y cuando furiosamente al tratar de separarse del hombre Susana empleó la potente fuerza de sus musculosos bíceps y antebrazos para empujar hacia atrás y tratar de liberarse de esa polla que le estaba taladrando por el culo el resultado, previsible, fue que ella misma se empaló hasta el fondo con la polla de su vecino y notó como el vientre del hombre se pegaba a su culazo penetrado y sus huevos golpeaban contra su sexo. El dolor la atravesó como un rayo y se quedó paralizada y boqueando ...
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