Mi vida cómo perra - Relatos Eróticos

Mi vida cómo perra

... Comprobó que los huevos y la polla estaban completamente tapados por la cera. Cogió la vela que tenía metida en el culo y de un empujón la metió más adentro.Se dirigió hacia la gorda y le preguntó que estaba haciendo. La otra dándose cuenta de que era un Amo, se arrodilló delante de el, e inclinándose y besando su botas le dijo “Señor estoy torturando a la perra por mal comportamiento. “Torturar? (Dijo el ). “ que sabes tú de torturas inútil. Vas a ver lo que es tortura”, le cogió uno de los pezones y empezó a retorcer lo con rabia. Ella se quejaba, pero él no paró hasta que cayó al suelo. Pude ver que el Dueño,. Se había sentado en un sillón cómodamente con una cerveza en la mano. Estaba en la zona de penumbra, con lo que podía observar el escenario perfectamente iluminado y cambiar la vista, mirando cualquiera de las pantallas que estaban distribuidas por la sala. “trae mi maletín y déjalo sobre la mesa. (Era uno de esos como los que usaban los médicos.). Suelta a la perra y dale la vuelta, ponla boca arriba y aprieta bien las correas. Y suéltale los huevos de momento. Y apaga la vela del culo pero no sé la saques “ Ella puso el maletín delante de mi cara e hizo la que le mandaba y en un momento, estuve de nuevo atado fuertemente a la mesa. Aún me dolía el culo de los palos y la cera. No sabía que era lo que me esperaba, pero me resigne a sufrir. “Saca del maletín los ganchos nasales y el abre bocas, date prisa”. Ella hizo lo que le pedía y le dio los ganchos nasales. El ...

... me metió cada uno en un orificio de la nariz, tiro hacia atrás de las cuerdas que tenían enganchados, y tensándolos, los sujetos a la mesa. Los agujeros de la nariz me quedaron abiertos y me forzaron abrir la boca. A continuación saco del maletín un sistema mecánico que me metió en la boca y rodando una rosca me forzó a abrir la boca y no poderla cerrar. “Venga, saca las pinzas”, le dijo a la gorda. Está le dio unas pinzas metálicas con las cuales me cogió la lengua y la saco de la boca sujetándola fuera. Cogió una vela la encendió y empezó a dejar caer gotas en los agujeros de la nariz, la boca y la lengua. Me puse a chillar y a intentar escapar pero estaba fuertemente sujeto y no podía hacer movimiento alguno. Luego se dedicó para los pezones dejándomelos completamente cubiertos de cera así como el ombligo. Lo hacia fríamente sin sentimientos, se notaba que estaba acostumbrado y tenía experiencia. Se volvió a la gorda. “sujétale la polla hacia arriba y sácale el capullo, pero no se la sueltes”. Ella, pellizcando con dos uñas la punta, la sujetó y con la otra mano, bajó el pellejo a tope dejándomela pelada. La sujetó hacia arriba. Mientras él dejaba caer gotas de cera en la punta cayendo en el agujero. Volví a chillar y terminé llorando. La gorda, se reía y me la apretaba fuerte. “Ya veremos si después te ríes tanto cerda” le dijo él. Ella se puso sería. Al fin dejó de tirarme cera, dejó la vela y me cogió de los huevos.Se dirigió a mi Dueño, “ Quieres que la castre ahora ?.” ...