Educado una familia Cap VI Parte XIV
Fecha: 28/04/2018,
Categorías:
Incesto
Autor: wendy1988, Fuente: SexoSinTabues
... claro que mi hermanita se llevaba a jugar al perro detrás de la barda de la casa; a aquel sitio de nuestras confidencias del que sólo ella y yo teníamos conocimiento. Ahora estaba segura de que el artilugio de mi lista y caliente hermanita al proponerme que nos retirásemos a nuestras habitaciones era sólo parte de su plan para poder estar a solas con Bat, pues mi presencia le impedía actuar con la libertad que deseaba. Pero también me daba cuenta que después de todo yo no era menos lista que ella, ya que mis corazonadas estaban a punto de conducirme a conocer la verdad de su oculto secreto, que por otro lado tanto ansiaba saber. Debo confesar que yo, independientemente de querer ver lo que ella y Bat hacían a escondidas, lo que más anhelaba secretamente también era poder aprender de ella para hacer yo igualmente lo mismo con el perrito, pues después de haber visto cómo se ponía Lucy de caliente en el bosque practicando esos jueguitos prohibidos con el can, y de haber admirado aquel pedazo tan largo de carne rojiza que le salía trepidante a Bat entre sus patas traseras, aquella visión no podía borrarse de mi mente tan fácilmente. Ahora estaba convencida de que la inteligente Lucy sabía muy bien aprovechar el tiempo y las oportunidades, pues estaba segura de que el descubrimiento por su parte de aquel apartado sitio ubicado detrás de la barda de nuestra casa no estaba destinado únicamente a nuestras confesiones íntimas, sino también lo utilizaba de manera secreta para la ...
... práctica de cosas que aún desconocía, aunque a estas alturas bien que comenzaba a imaginármelas. Todo eso me embramaba tanto que mis calzoncitos se mojaban de allí abajo con abundante rapidez, y apenas si podía contener mis ansias de salir corriendo hasta el escondido lugar para observar todo eso. Con prudencia dejé pasar varios minutos esperando irme yo también detrás de ellos, pero algo que la verdad no imaginaba vino a interponerse en mis perentorios planes. Estando a punto de salir de mi cuarto escuché de pronto unos suaves toquecitos en mi puerta. Puesto que no estaba dispuesta a que nada interrumpiera mis candentes deseos de espiar a mi hermana, lo más veloz que pude pensé en hacer algo, y lo único que se me ocurrió en ese instante fue esconderme con rapidez dentro del armario de mi guardarropa, mientras oía cómo seguían tocando con suavidad la puerta de mi habitación. Me quedé allí sobrecogida y acurrucada entre los colgantes de la ropa, viendo por la rejilla hacia el interior de mi cuarto. Escuché cómo se abrió la puerta y alguien penetró en mi dormitorio. Cuando ví la figura de mi mami perfilarse enfrente de mí me pregunté qué estaría buscando hacer ella al entrar allí, lo cual me produjo cierta sensación de placer en mi rajita ya humectada, recordando nuestro último encuentro y pensando que tal vez no fuese una mala idea salir de repente de mi escondite y tratar de asustarla, como para dar la impresión de que me había escondido allí con ese fin. Pensando en que lo de Lucy ...