1. Ya soy el puto del equipo (XII)


    Fecha: 10/05/2018, Categorías: Gays Autor: janpaul, Fuente: CuentoRelatos

    ... mujeres cocinando y limpiando la casa. Nosotros no molestaríamos en el interior de la casa porque en la piscina había baños, solo entraríamos por el día a comer en el gran comedor desde la piscina y luego cada uno se tumba donde quiere. En la noche nos podrían dejar preparada la cena y nosotros nos lo arreglaríamos.
    
    La casa no tenía wifi, pero no costaba nada contratar un wifi rural, también serviría para don Fermín y para otras ocasiones. Los chicos hoy tenemos costumbre de no aburrirnos, antes de que llegue el aburrimiento con el móvil hacemos mil milagros y se nos pasa el tiempo rápido. Esto fue algo que tuve que realizar al día siguiente y se lo comuniqué a don Fermín que se encargó de ello. Un día quizá tendré que regalarle la casa a don Fermín, aunque él dice siempre que es muy grande para ellos.
    
    Fuimos Abelardo y yo a hablar con Mauricio, esperamos que saliera de uno de sus exámenes y le planteamos la posibilidad de hacer una excursión a una casa de la sierra con unas 24 habitaciones, gran comedor, gran cocina y una excelente piscina que se la detallamos, ya que Abelardo lo midió todo por pasos y delante de Mauricio iba mostrando la extensión de cada cosa que se mencionaba. La única dificultad que puso Mauricio es que algunos jugadores son de escasos recursos económicos. Le respondí que todo quedaba incluido en la asistencia, nos resultaría gratis, autobús de transporte, cocineras y comidas y bebidas. Era un premio por ganar en el campeonato. Se entusiasmó ...
    ... y allí mismo fue esperando a los jugadores de ese examen y se quedó en comunicar a todos para dos días después y plantearlo.
    
    Allí mismo Mauricio nos comunicó que habían hablado del Rectorado con él para que se preparara a capitanear el equipo para acceder a la categoría superior.
    
    — Pienso que tú tienes parte en esto, ni sé por qué. Sé que tendremos de entrenador un profesor de la Universidad, aún no sé quién es y que se está buscando un portero, —me miró con cara de pena.
    
    — Mauricio, he renunciado a ser jugador, pero no a formar parte del equipo. No puedo asegurar que mi continuidad os beneficie, pero me veréis en todos los partidos y, si me dejáis entrar al vestuario, estaré allí para ver vuestros hermosos culos, ¡cabrones!
    
    — Me estás poniendo, ¡joder!, hablas así tan libre…, —dijo Mauricio, acomodándose el paquete por encima del pantalón.
    
    ***** ***** *****
    
    En el Rectorado se habían tomado muy en serio lo del equipo, sabiendo que iban a tener una donación para mantener dignamente los equipos y ayudar a algunos jugadores con menor capacidad económica. Se había puesto en manos del Decano de Derecho redactar el estatuto deportivo y la Sociedad anexa a la Universidad que debería velar por el deporte. Aprovecharían para que en la medida de lo posible la cantera de jugadores, entrenadores, preparadores y asistentes se formara en el interior de la Universidad, y otros detalles que había que tener en cuenta, como la ampliación del gimnasio y de las gradas de ...
«1234...11»