1. Otra vecina pasional y divorciada


    Fecha: 20/05/2018, Categorías: Sexo con Maduras Autor: zorro_en_celo, Fuente: CuentoRelatos

    ... Tiziana jadeando.
    
    El solo hecho de ver la cara de placer que la golfa de mi vecina al ser taladrada por mi nabo, me excitaba más todavía y la muy puta se toqueteaba una teta mientras me lanzaba insultos sexuales:
    
    —¡canalla!, ¡hijo puta!, ¡me matas de gusto! —vociferaba de placer Tiziana— ¡hacía tiempo que no sé lo que es un macho entre mis patas, pero ahora solo deseo que solo tú me jodas, maricón! —gritó todo corrida Tiziana.
    
    Yo me movía arriba y abajo y daba mil empellones para darnos mutuo placer al taladrar y trepanar con mivergón el efervescentechochazo de Tiziana que de placer doblaba sus piernas.
    
    —¡me pones muy cachonda, cabrón! —musitaba Tiziana lascivamente.
    
    —¡tienes un bonito coño! —murmuré yo lujuriosamente.
    
    —¡ah!, ¡ah!, ¡ay así!, ¡ah!, ¡ah!, ¡uff!, ¡qué gran follada me estás pegando, maricón —jadeó Tiziana lascivamente.
    
    —¡jódeme !, ¡oh!, ¡oh!, ¡oh!, ¡oh!, ¡ah!, ¡ah!, ¡ah!, ¡ah!, ¡ah!, ¡ah!, ¡así cabrón, jódeme! —mugió jadeante Tiziana.
    
    Yo proseguía dandorabazos a esta zorra libertina de mi vecina Tiziana que tenía unas soberbias tetazas que me ponían calentorro.
    
    —¡jódeme!, ¡oh, sí, cabrón!, ¡jode a esta puta golfa!—bramó Tiziana gimiendo.
    
    Mientras yo me empleaba a fondo en dar cienrabazos a esta puta guarra caliente, Tiziana vociferaba insultos sexuales que me ponían la carne de gallina y me empujaban e impelían a darle más rabo sin parar mientras notaba que su muy agitadocoñargón estaba más caliente que un alto horno.
    
    —¡ah!, ...
    ... ¡sí, métemela toda, cabrón!, ¡no pares, maricón!, ¡nadie me jode tan bien como tú, pedazo de cabrón!—aullaba Tiziana de gozo.
    
    Yo jodía sin parar el muy acaloradochochazo de la fulana libidinosa Tiziana, mientras repetía una y otra vez la misma sexual cantinela:
    
    —¡dame rabo, cabrón!, ¡dame rabo!, ¡no la saques!, ¡matame de gusto! —gimió Tiziana de deleite carnal.
    
    Saqué un segundo mi bien pringado rabo en sus mil caldos vaginales, pues la putona Tiziana no paraba de desgañitarse, gemir, jadear y dar mil vagidos cual máquina sexual.
    
    —¡oh, sí!, ¡sí!, ¡sí!, ¡sí!, ¡sí!, ¡sí!, ¡sí!, ¡ah!, ¡ay así!, ¡ah!, ¡ah!, ¡uff!, ¡jódeme!, ¡jódeme más, cabrón!—aulló Tiziana toda corrida.
    
    Me situé a otro lado, mientras Tiziana tenía la pierna izquierda arriba y la derecha descansando y yo la fornicaba y jodía el coño y la muy puerca se desgañitaba entre insultos sexuales:
    
    —¡así cabrón, jódeme!, ¡joder, que gustazo me das, cabron!—bramaba Tiziana de lujuria.
    
    Agarraba con fuerza el anca de Tiziana y la daba mil empellones en el ardoroso y acaloradocoñargón de Tiziana mientras la muy zorra me miraba con vicio y lujuria desatada.
    
    —¡me gusta tu rabo!, ¡me pones muy caliente, cabrón! —voceaba Tiziana de lascivia incontenida.
    
    Yo proseguía taladrando el muy bullentechochazo de la fulana libidinosa Tiziana que me seguía insultando sexualmente y me pedía más y más rabo:
    
    —¡que follada me estas pegando, bribón!, ¡así cabrón, jódeme viva!—se desgañitó de lubricidad la muyzorrona ...