1. Confidencias 23 Mi anito para Dulce y Eduardo


    Fecha: 26/05/2018, Categorías: Gays Autor: Alvaro-L-de-H, Fuente: SexoSinTabues

    ... ocasión, me pones muy caliente, y mejor sería comprarnos una isla desierta para andar siempre sin ropa, pero cerca de la civilización para no excluirnos. Resulta que eres más caliente que yo y eso me gusta, poder estar siempre a tu disposición para recibirte cuando quieras. No dudes de que la vida que me propones sería lo ideal y lo que deseo, si se puede realizar. Espero que la vida no se nos complique más, aunque será mucho el tiempo que tendremos que soñar hasta que todo se convierta en realidad y poder estar unidos. Ahora tú tienes que trabajar para sacar adelante los negocios de tu familia y yo tengo que continuar al lado de Eduardo, que al final, para mí, resulta ser mejor que mi padre. -------------------------------------- Pasaron los días sin novedades. El martes, a la vuelta del ballet, Eduardo me esperaba. -David me ha pedido permiso para venir y que os veáis, en realidad está deseando verte, le he dicho que antes quería que tú dieras tu aprobación, algo tendrás que decir. Le agradecí interiormente que al menos, en apariencia, quisiera que yo lo aprobara, eso me hacía importante. -Estaré encantado de verle y hablar con él y como él quiere, conocernos. Eduardo reflejó su mejor sonrisa, nada se le oponía en la vida. -¿Te parece bien que sea mañana después de clase? -De acuerdo, no tengo otra cosa que hacer. No decía toda la verdad pero era lo que él deseaba escuchar. Por otro lado se observaba mucho movimiento de furgonetas que descargaban muebles, y también ...
    ... trasladaban algunas cosas de nuestra casa. Estaban finalizando y solo faltaban algunos detalles para terminar las obras. Al final mamá ocuparía tres habitaciones de aquella parte de la casa y Pablo tendría su habitación entre la de Eduardo y la mía, allí no se necesitaba realizar obras de mejora, solamente llevar sus cosas con los muebles elegidos y eso es lo que los operarios hacían. La casa y la vida en ella cambiarían radicalmente en poco tiempo. Recibí algunas notas de Alberto a las que no contestaba. No tenía sentido seguir pensando en él, ni en despedirme siquiera después de lo que Eduardo quería que hubiera entre David y yo, seguía pensando en lo que Alberto y David pudieran haber sido o tenido entre ellos. Aunque aún desconocía exactamente lo que Edu se proponía, lo que fuera que pretendiera, ahora tenía ganas de estar con David y ver si se iba descubriendo. Parecía que David no sería como los otros compromisos con sus amigos, donde solamente querían follarme, sentir mi cuerpo joven rendido y entregado a sus deseos. Y ahora te contaré lo que sucedió esa noche con Dulce y sucedió sin premeditarlo. Después de cenar estuvimos un tiempo acompañando a Eduardo mientras miraba las noticias que a mí, personalmente, me aburrían y al parecer también a Dulce. Quería subirse sobre mis rodillas estirando su cuerpo y noté algo húmedo en la pierna, se estaba frotando con ella y empezó a moverse como si estuviera copulando, como hacen los perros. Eduardo desvió la mirada y me dirigió un ...
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