1. La lluvia de mi mujer


    Fecha: 09/11/2021, Categorías: Fetichismo Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... gustaría que te llenasen todos los agujeros del cuerpo unos machos pollones. ¡claro, es que eres una puta!
    
    Y así todo el rato, y yo disfrutando un montón. Tenía el culo abierto del todo, sintiendo placer con cada embestida, notando cómo mi esfínter se me abría y cerraba… me encanta esa sensación. Mi polla estaba dura como una piedra, soltando líquido preseminal sobre mi cuerpo según se movía… Y juntado con el morbo de la dominación que estaba ejerciendo María sobre mi, lo estaba convirtiendo en una gran experiencia sexual.
    
    Mi mujer me cogió la polla y empezó a hacerme una paja también, y dándome a lamer mis fluidos cuando le manchaban la mano… ¡me encanta también!
    
    El ritmo del polvo era frenético, estaba disfrutándolo y estaba llegando al punto en el que me terminaría corriendo. Iba ser una corrida histórica, lo veía venir.
    
    María, me voy a correr como sigas así.
    
    ¿vas a soltar tu leche y pringarte de semen todo tu cuerpo?.
    
    Sí, creo que voy a soltar chorros de leche.
    
    Uhmm, sí, quiero ver como sueltas leche, y cae sobre tu cuerpo, como si un macho pollón se corriese encima de ti… uhmmm
    
    Joder, más morbo. Me encanta sentir el semen caliente cayendo en mi cuerpo, mío cuando me corro, o de un tío cuando tengo sexo homo. Es un morbazo.
    
    Además, te lo vas a tragar. ¡Cuando te corras te vas a tragar ese semen de macho, como el maricón que eres!
    
    Y siguió dándome caña, y yo me concentré en mi polla, mi culo, su mano e imaginándome el semen corriéndome por la ...
    ... cara… y exploté. Ella lo notó, como siempre, antes de que sucediese. Y gimió conmigo mientras mi polla soltaba chorros de semen caliente, disparados hacia mi pecho, mucho semen, más que de costumbre, supongo que por la excitación generada. El orgasmo fue largo y no dejé de gemir, mi mujer tampoco, no le faltó mucho para tener otro orgasmo creo yo, no era fingido.
    
    Ella seguía taladrándome el culo mientras me corría, y sentía los latigazos en mi esfínter con cada contracción de mi polla y chorro de leche, fue glorioso. Cuando paré de soltar leche, ella cogió semen de mi cuerpo y me lo acercó a la boca.
    
    Abre la boca putita, que te voy a dar leche.
    
    Abrí la boca y dejó caer el semen de sus dedos en mi lengua. Noté el sabor amargo de mi semen en mi boca, lo degusté mientras María cogía más de mi cuerpo y me lo metía en la boca.
    
    Lame la leche mamón, trágatela toda.
    
    Le obedecí, me la tragué toda como me pedía, encantado de hacerlo.
    
    Joder, cómo me pone verte ser tan guarro.
    
    Y me seguía dando por el culo, continuaba moviéndose, más lento, pero me taladraba el culo sin parar. Y me seguía gustando a pesar de haberme corrido ya, aunque normalmente se me pasan las ganas.
    
    Terminé de saborear mi semen chupándole los dedos que tenía en mi boca. Se tumbó sobre mí, y sobre mi polla todavía dura, y me metió un morreo intenso, mucha lengua.
    
    Se levantó despacio, sacó la polla de goma de mi culo y la tiró al suelo, se volvió a tumbar encima de mi y se metió mi polla en su ...