La lluvia de mi mujer
Fecha: 09/11/2021,
Categorías:
Fetichismo
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... separó con un espasmo. Ella dio un respingo por lo sensible de la zona después de la corrida que se había metido, me encanta hacerlo, y a ella que lo haga claro.
Se apartó y volvió a la postura anterior, apoyándose en la pared, y volvió a mearme encima, sin pudor ya en mi cara. Cerré los ojos a tiempo y noté cómo me regaba entero.
¿te gusta esto putita?, ¿es lo que querías?... eres muy cerdo, maricón.
No vi su cara mientras me lo decía, pero noté su sonrisa excitada en su tono. Su segunda meada fue más corta, pero notaba el líquido caliente caerme por la cara y el cuerpo…y mi polla durísima. Estaba cada vez más excitado.
Joder, no sabía que eras tan guarro.
Jeje, a mi me ha gustado, y creo que a ti también. Le dije sonriendo.
Si, me gusta tenerte así de cachondo…y no hemos terminado putita. Me dijo sonriendo mientras cogía el grifo de la ducha, lo abría y cogía el surtidor.
Comprobó la temperatura del agua y, cuando estuvo a su gusto, se puso el surtidor en el coño, apuntándome e hizo el cambio del grifo al surtidor.
¡Abre otra vez la boca maricón, que te voy a limpiar con mi superchorro!
Abrí la boca mientras me rociaba con el agua caliente, haciendo que volvía a mearme en la cara. Y sonreía con vicio, encantada. Me duchó entero, limpiándome sus meos. Se paró en mi polla, y, agachándose, acercó el surtidor a mi culo.
Abre las piernas.
Le obedecí y acercó el chorro a mi ojete, me estremecí de placer. Ya tenía el culo sensible y agradecí el ...
... chorro y su roce. Me besó, metiéndome la lengua hasta el fondo, con voracidad. Había tenido un orgasmo pero no parecía que le hubiese llegado. Habría más, seguro.
Levántate, me dijo apartándose.
Obedecí y me levanté. Tenía mi polla durísima. Me la agarró y tiró de ella para que me acercase. Volvió a meterme la lengua hasta la tráquea. Sentí su cuerpo ardiendo contra el mío.
Me empujó dándome la vuelta, poniéndome contra la pared de la bañera. Colocó el grifo de la ducha en el soporte, quedando por encima de mi cabeza, mojándome. Apoyé los brazos contra la pared y me puse en posición de recibir. Esto es, saqué el culo mientras me agachaba un poco, esperando mi turno.
Cómo sabes lo que viene ahora! Me dijo.
Eres un mariconazo…te voy a romper el culo!
Yo estaba cada vez más excitado, estaba siendo ya una de las mejores sesiones de sexo de mi vida, y ¡aún faltaba!
Se colocó detrás de mí, noté la polla de plástico contra mi culo que había cogido en algún momento…y me la metió sin contemplaciones, hasta el fondo, despacio, pero sin parar hasta que noté su cuerpo contra el mío y todo mi culo lleno.
Pegó su cuerpo al mío, me agarró la polla con fuerza y empezó a mover las caderas. Me tenía bien cogido, por delante y por detrás. Me dejé hacer y me concentré en disfrutar. La oía susurrarme cosas pero no la estaba escuchando, solo sentía su mano en mi polla, y la polla de plástico entrando y saliendo de mi culo. Me sorprendí cuando me di cuenta de mis gemidos de ...