-
Una mujer para todo uso
Fecha: 15/12/2021, Categorías: Dominación / BDSM Autor: zari, Fuente: CuentoRelatos
En esas semanas con pomadas y analgésicos inicié un camino que no sabía que fin tendría, fueron días con la sensación de estar atrapada aun, inmovilizada, entre la cama y esa descomunal bestia encima de mí que me asfixia, empotrándome su verga hasta los límites de mi estómago y de mis orgasmos. Ya conté que mi pareja juega póker y ya escribí sobre cuando perdió y me tocó pagar. Y claro, volvió a suceder. Y yo ya no era premio, era un objeto para hacer lo que no hacían con sus esposas, para experimentar y explorar sus perversiones. Una mujer para todo uso. Debo mencionar también que Luis mi pareja llevó nuestra relación, que es solo sexual (él es casado) hasta entregarme a un grupo de amigos. Lo que para mi ha resultado sorprendente es que lo acepto, y este sentirme usada, humillada, un objeto desamparado, me provoca una morbosa sensación de miedo y excitación, mientras mas expuesta e indefensa he ido quedando entre ellos mas intensos son mis orgasmos, mientras mas débil más penetrantes las sensaciones. Una amiga sicóloga, me sugirió una vez que escribiera aquello que me perturba porque así se puede lograr esa distancia necesaria para poder asumir lo que la razón y la moral después niegan. Así que ordenadita comenzaré desde el principio de esta tercera vez. Lo que han hecho conmigo, y que he dejado que me hagan, debo reconocerlo. Jorge Luis mi parner es un hombre de ya casi 50 años, debe pesar 80 kilos, delgado de un metro y ochenta, serio, casado, es jefe en una ...
... minera y está muy bien, con unas manos y ojos de sueño. Yo tengo 50, delgada y bajita, labios, brazos, cuello delgados menos las piernas y un trasero justo, redondo y parado aun que se dan vuelta a mirar y eso me gusta. La noche que hoy cuento habían venido tres amigos a jugar y al final quedaba mi pareja, el Chico Nano y uno al que le decía el Dealer el que había obligado a Jorge que me compartiera con ellos la primera vez. El cuarto jugador siempre se iba antes. Era tarde ese viernes y ellos jugaban en la mesa al fondo y yo estaba en el sillón terminando de ver una peli cuando Luis se me acercó, socarrón y me dijo bajito como preguntando lo que yo sabía era una orden: - Peladita..., vas a tener que repetir... ya me comprometí. Yo lo miré con cara de odio, entendí perfectamente que era ese "repetir". Era cerca ya de medianoche. Sus tres amigos me miraban que me comían desde que llegaron, el Dealer y el Chico seguro se acordaban de esas otras noches en que me usaron. Si. Si tu lo dices, claro amor…, le dije suave, con una falsa sonrisa. Luis era un hombre que tenía momentos en que con su mirada me paralizaba. Esa era mi suerte. Lo sabía y la he asumido. Además no quería que otro hombre me dejara nuevamente como mi ex después de 25 años. Luis les invito a la sala y dejaron la mesa de juego y se acercaron a los sillones donde yo veía la peli. Era de unos tipos que disfrutaban chocando autos y tenían sexo heridos. Luis me corrió dejándome al medio del sillón grande y se ...