Una mujer para todo uso
Fecha: 15/12/2021,
Categorías:
Dominación / BDSM
Autor: zari, Fuente: CuentoRelatos
... solamente, en una casa en la playa. Y a Luis me costó darle la pasada como dices porque tu sabes que del banco no podemos salir con clientes, y Luis y tu y todos ustedes son clientes, y casados. Y en esos momentos tocaron la puerta.
- Si, tenemos una dependencia mutua podríamos decir. Luego cambió de tono y me ordenó: Anda a abrir, y supe que desde ese momento estaba completamente en manos de él. En verdad yo sabía que algo así podía pasar alguna vez: quedar sometida a un grupo de hombres
Abrí y de la sombra del pasillo apareció un hombre que no iba a caber por la puerta. La mascarilla solo dejaba verle sus ojos oscuros y unas cejas muy pobladas. El pelo corto y tieso. Los brazos gruesos y peludos asomaban de una camisa manga corta y manos de trabajador. Las uñas limpias por suerte pensé. Daba la impresión que se había bañado hace unos minutos. Ingenua pensé como buena madre que lo era en la semana, si teníamos monedas… y no traía ninguna pizza, y eran pasadas las doce y había toque de queda.
- Dile que pase, dijo de adentro el Chico Nano y presentí algo muy malo. Bajé la vista y disminuida me hice a un. El hombre pasó rozando el dintel de la puerta y se adelantó a saludarlos mientras yo atrás cerraba. Por un momento pensé en quedarme afuera, pensé que si fuera una mujer normal debía irme, pero algo mas poderoso que yo me hizo caminar hacia adentro hasta junto a un sillón y esperar, con las piernas inseguras y la mirada en el suelo. El escorpión siempre va a morder ...
... a la rana, es su destino pienso hoy cuando recuerdo esa noche.
- Princesa sírvele un trago, me dijo Luis. El hombre miraba la sala como buscando algo. Le serví un whisky con hielo y al alzárselo noté que aun con mis tacones altos de zapatos de fiesta le llegaba mas abajo de su axila.
- Princesa, mira él se llama… en realidad nadie sabe cómo se llama pero trabaja una cuadra mas abajo en un bar, saca borrachos, acarrea cajas, le decimos el Gringo. El tipo se sonrió. "Mucho gusto" me dijo y se me acercó y me tendió la mano yo le entregué la mía que se perdió en la de él. Quedé a su lado y noté lo diminuta que era a su lado, mi boca mas cerca de su cinturón que de su cara, mis pechos en su cintura. Y era el doble de ancho que yo.
- Anda a ponerte sexi -me ordenó El Chico- mientras nosotros arreglamos acá. Cuando dejaba todo a media luz escuché que el tal Gringo preguntaba “Ella?... Ella sola? apuntándome con su dedo. Entré al dormitorio como los ratones que una vez que el gato los ha atrapado y ya medio muertos los deja libres y corren en círculos, ya no intentan arrancarse, corren entregados a su suerte, así en ese estado saqué un baby doll rojo transparente con un colaless de encaje por delante y me metí al baño, me lavé los dientes, como ratón ya cogido me arreglé el maquillaje, el pelo, no quería ni podía pensar en nada. Luego me desvestí y me puse la transparencia pero antes sequé mi entrepierna porque estaba húmeda, mas húmeda de lo normal. Estaba temblando pero la ...