Mi nueva amiga
Fecha: 23/01/2022,
Categorías:
Sexo Interracial
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... topamos de casualidad e hicimos muy buena amistad y fraternizamos hasta lo más íntimo. Lo logramos en muy poco tiempo.” Le platiqué en pocas palabras que eran dos parejas, fotógrafos de modas, y nos invitaron y de ahí nació una amistad super íntima.” Ya le expliqué.
Tenía que regresar a sentarme con Greg y tomar un refresco. Le dije que fuéramos con Greg, no aceptó, pero me trajo un té helado. Me platicó que ella era de Macao, que había sido colonia portuguesa y dominaba el idioma portugués así que el español no se le dificultaba.
“¿Has ido a algún campo nudista aquí?” quería saber ella
“No, no conozco ninguno.” Tuve que decirle
“Aquí cerca hay uno, muy exclusivo. Pero hablamos de él en otra ocasión.” Me dijo
“Me gustaría ir a ese campo nudista, ¿se llega por la carretera?” alcancé a preguntarle.
“No, solo por mar, hay un bote que hace servicio. Si quieres vamos juntas, yo también tengo curiosidad, nunca he ido. Dime cuando puedes.”
“¡Mañana mismo, solo dime en donde nos encontramos y a qué hora!” Y ya nos pusimos de acuerdo.
Como Horaco había invitado a Greg a acompañarlo en su trabajo, los dos iban a estar fuera hasta en la tarde, así que llamé a mi amiga china de Macao y fuimos al muelle a embarcarnos al velero que nos llevaría al campo nudista que yo quería conocer. Nos preparamos, dejamos nuestras pertenencias en su negocio, solo nos llevamos los trajes de baño puestos y toallas. Todo lo de valor lo dejamos, íbamos con todo prepagado, hasta una ...
... sesión en temazcal, masaje, comida y todo.
Nos embarcamos en el velero y desde ahí empezó una aventura nueva para mí.
“Todos los que van en el velero son homos, desde el capitán y dueño, el que está de pie, encuerado con su verga colgando y los dos marineritos que ayudan.” Me puso al tanto, se les notaba muy bien.
“Así que te puedes desnudar y tomar un poquito de sol. Platícame de los chinos que conociste tengo mucha curiosidad saber cómo ven ustedes, mujeres, a los chinos.” Me pidió y ya le conté con detalles todo lo que sucedió en ese encuentro.
“¿De veras, hicieron sexo y todo?” quería saber.
“Sí, claro, y ¡fue fabuloso, los dos chicos cogían muy bien y rico y las dos chavas se encargaron de mis compañeros, los dejaron muy bien servidos! ¡Lo repetimos varias veces, yo intercambié entre los dos chicos, los dos me sirvieron espléndidamente!”
“¿Y los chinos lo hacían diferente, de cómo se acostumbra por acá?” tenía curiosidad de saber. Ella ya de una edad madura, no vieja, como de unos 30 años. Yo consideraba que ella ya debería de saber bastante de lo que son las relaciones hombre mujer, pero por sus preguntas ya no supe qué pensar.
“¡Igualito, no hay diferencia entre nuestros dos mundos! Sientes un placer muy grande. Sí, en el momento piensas en que son extraños y que a lo mejor saben otras cosas. Pero sentir sus penes dentro de ti es lo mismo. Con todos terminas deseando más.” Le contesté.
“¿Y con las chicas? ¿cómo fue? ¿Se dejaron tentar?” Quería ...