Van Gogh Alive: The Experience
Fecha: 24/01/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Gargola, Fuente: CuentoRelatos
... increparnos y nos corta el rollo, supongo que no más que nosotros a ella, y por eso invito a mi nuevo amigo a abandonar el Círculo de Bellas Artes, y éste acepta encantado.
Al salir, sigue lloviendo y hace un frío de justicia. La temperatura es de un grado y yo, acostumbrada al ambiente templado de la costa, me tapo la cara con las solapas de mi abrigo. Son las siete y media de la tarde y los dos estamos de acuerdo en que nuestra mejor opción es tomar un café con leche caliente en cualquier cafetería antes que estar en la calle soportando un frío inclemente. Él es de Madrid y está acostumbrado a las bajas temperaturas de la sierra, pero yo no. Mientras caminamos hacia la cafetería me parece estar haciéndolo por Siberia y cuando accedemos al interior, el calor me acoge con un abrazo.
Yo pido un café con leche hirviendo y él un café solo, después nos damos cuenta de que tenemos mucho en común.
Robert Downey junior es profesor de historia del arte en la facultad de Geografía e Historia en la Complutense y yo soy directora creativa en una agencia, escribo críticas de arte en una revista y dirijo una galería. Le hago saber entonces que tiene un aire a “iron man” y logro arrancarle una sonora y contagiosa carcajada que se me contagia, de tal modo que nuestros vecinos de mesa voltean la cabeza ante nuestro manifiesto estado de alegría.
Detecto que empieza a existir una química especial entre nosotros, aunque ahora que lo pienso, ha sido así desde el principio, sin ...
... embargo, es en este momento que me doy cuenta de que me encuentro muy a gusto con él y a él parece ocurrirle lo mismo.
—¿Y tú estás casado?, —le pregunto, no sé exactamente para qué. Entiendo que es todo un tópico, pero él sabe que lo estoy, y también sabe a qué atenerse en ese sentido, y por tanto, yo no puedo decir lo mismo.
—Sí, —responde. —Me pasa un poco como a ti. Mi mujer parece que siempre tiene alguna puta que confesar, perdón por la expresión, —se disculpa. —Compramos las entradas para venir juntos, pero como el arte no entra dentro de sus prioridades, ha preferido irse a Valencia a unas ponencias. Ella es de matemáticas.
—Pues podemos emparejarlos. Mi marido también está en Valencia, y también es de ciencias —le digo sin pensar mis palabras.
—Eso estaría bien. Tú y yo disfrutando del arte y ellos a su ciencia—me dice agregando a su contestación una cómplice sonrisa.
—No se puede decir que hayamos disfrutado mucho de la exposición. Ha sido un truño.
—No hay mal que por bien no venga. ¿No dicen eso? Si no hubiese sido así no estaríamos aquí tomando una café, y desde luego, yo no estaría disfrutando de tu grata compañía.
—Gracias, —le digo mostrando mi mejor sonrisa.
—Es la verdad, —me declara, esbozando la suya en un gesto que me enamora.
Robert Downey me cae fenomenal y me siento bien con su compañía. Podría estar todo el día contemplando ese rostro anguloso, adornado con una perilla que parece recortada a laser, una mirada enigmática que ...