1. Las fotografías despertaron su calentura


    Fecha: 05/02/2022, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: femerba, Fuente: CuentoRelatos

    ... cuerpo.
    
    Sea como fuere, esa posición resultó fabulosa. El rostro de ella se congestionó, se puso colorada de la excitación y, después de varias embestidas y numerosas variaciones en lo forma en que aquel la penetraba, finalmente soltó un estruendoso grito que, con el apaciguamiento de la sensación, de a poco fue bajando en volumen. Se agarró del cuello de Wilson y retuvo su cuerpo, unido al de ella, mientras disminuía toda la excitación que había surgido en aquella singular follada. Él se retira dejando ver en el condón los restos cremosos de su semen mientras que ella, aun agitada, permaneció tendida en la cama. Su respiración aún era agitada y sus pechos se movían arriba y abajo.
    
    El muchacho entró al baño, se duchó y, al poco rato, salió relajado y con cara de satisfacción. Al fin y al cabo, para no haberse visto por algún tiempo, parecía que ya había recuperado los polvos perdidos y había sabido gozar de ella lo suficiente. Se sentó en la cama y, sonriente, dijo, ahora sí le recibo un trago. Creo que me lo merezco. Usted dirá, contesté. Un ron con coca-cola estaría bien. Bueno, espere lo pido, pues con esa arrechera suya, no hubo tiempo de pedir nada. Tranquilo, no se preocupe, yo espero… Ella, mientras, se había levantado y entrado al baño.
    
    Hice las llamadas respectivas para solicitar el servicio y mientras esperábamos estuvimos charlando. ¿Cómo le ha ido? Todo bien, me comentó. Bueno, y ¿qué tanto compromiso tiene? No, lo normal, nada especial. Bueno, pero ...
    ... Laura me dijo que andaba ocupadísimo y que, si no era hoy, ya no sería. Dije eso porque, si lo aplazaba, de pronto ella se arrepentía y la cosa quedaba en veremos. Mejor aprovechar que ella tomó la iniciativa y sacar provecho que anda deseosa. Pues, sí, dije. Al parecer así ha sido, ¿no le parece? Si, dijo él, está bastante caliente el día de hoy. Bueno, esos es señal de que lo estaba deseando a usted desde hace días. Hay que aprovechar, dijo…
    
    Llegadas las bebidas y ya reunidos los tres, continuamos la conversación al calor de unos tragos. Bueno, no te puedes quejar, le dijo él a ella; me he esforzado bastante. Está bien, respondió ella, no tengo queja. Esperemos un rato a ver si levanto presión de nuevo. Admiro tanta energía, dijo ella, porque yo ya estoy que no doy más. No te creo, respondió aquel. Cuando estás así, resultas insaciable.
    
    Pasado un larguísimo rato, él, de nuevo, empezó a acariciarla y, con sus manos, tratar de estimular su clítoris, a ver si ella se animaba de nuevo. ¿Sabes qué?, dijo ella, la verdad, yo ya estoy agotada. Yo creo que mejor guardamos fuerzas para otro día. Y, con más ánimo, nos encontramos de nuevo. Bueno, dijo él, pero, entonces, para despedirnos, déjeme bañarla. Nunca lo hemos hecho. Buuueeeno, dijo ella, no muy convencida. ¡Vamos pues! Dijo él y me picó el ojo sonriendo, con cara de travieso.
    
    Entrados al baño fueron directo a la ducha, que estaba bastante amplia y se separaba del resto del mobiliario con un gran vidrio transparente. ...