Como conocí a mi hombre
Fecha: 09/03/2022,
Categorías:
Transexuales
Autor: morenatrans, Fuente: CuentoRelatos
... resbalaron por mi culete. Me había dejado súper dilatada.
Tras asearme un poco cogí de la mochila me cambié de medias, las que llevaba se habían roto ante la potencia de Javier. Aproveché para ponerme otro de mis tangas, en esta ocasión rojo. Pensé ponerme el top que traía, pero lo pensé bien y en esta ocasión quería ofrecerme a Javier sin nada. Por lo que me quité las medias quedando únicamente con el tanguita. Javier me acababa de convertir en una putita y ahora quería demostrarle que no quería ser una zorra cualquiera, quería ser SU putita. Salí del baño y volví al sofá con él. Se encontraba recostado, desnudo mirando la televisión que aún estaba emitiendo porno. No pude evitar fijarme en como su pollón volvía a estar morcillón. Dios, era insaciable. No podía creerme que después de haberme metido tal follada no mostrara signos de cansancio y aún tuviera ganas de más. Me tomó alrededor de sus brazos y comenzó a besarme.
Javier se tomaba su tiempo metiéndome mano, no dejó ningún rincón de mi cuerpo sin recorrer mientras enlazábamos nuestras lenguas. Yo no quería quedarme atrás. A pesar de la follada que me había metido unos minutos antes, volvía estar súper caliente. Con la mano cogí el miembro de Javier. Mmmm que pollón, no era capaz de comprender como había podido metérmela entera en el culo, pero no me importaba, solo quería disfrutarlo. Esa polla me volvía loca.
Empecé a pajearlo suavemente. Mi mano recorría la extensión de su polla y de vez en cuando ...
... acariciaba sus huevazos. Se notaban un poco más vacíos que antes, pero era normal, había descargado mucha leche sobre mi cara. Javier me dio un último beso y haciéndome un gesto hacia abajo. No hacían falta palabras en ese momento, entendí perfectamente que mi macho quería que su puta le ofreciera una buena mamada. Sin soltar su polla me situé entre sus piernas y mirándole a los ojos comencé a darle besos en su glande. Lo metí en mi boca y noté aún restos de semen y lo que intuí era el sabor de mi culo. Si antes el olor y sabor de su polla me encantaba ahora me estaba volviendo loca, estaba deliciosa. Paseaba mi lengua por toda su polla, de arriba abajo, saboreando ese sabor que tenía ahora después de follarme el culo.
- No te olvides de los huevos zorra. - Mmmm me volvía loca que me tratara con esa rudeza de nuevo. Encantada de obedecerle bajé un poco mi cabeza para alcanzar sus huevazos. Saqué mi lengua y empecé a pasearla por ahí, los besaba y comencé a introducírmelos en la boca. - Así, así, mmmm que bien lo haces zorrita. En serio no me creo que hoy haya sido la primera vez que has probado polla. Eres una tragapollas nata.
Las palabras de Javier me hacían comerle los huevos con más ganas. Su polla chocaba contra mi cara a medida que lamía sus huevos. Me encantaba sentirme así de humillada, comiéndole los huevos a mi macho. Javier puso sus manos en mi cabeza y me invitó a seguir comiéndole la polla. Acompañaba mis movimientos con sus brazos a medida que hundía su polla en mi ...