1. Desayuno para curar la cruda


    Fecha: 11/03/2022, Categorías: Sexo en Grupo Autor: Timken, Fuente: CuentoRelatos

    ... que la acompañe en la mamada.
    
    Mientras yo los veía ella me hace señas para que me acerque y le saque los calzones y en cuanto lo hago, me acuesto en el piso boca arriba para comenzar a lamer el sexo de ella, hasta que ella me pide que cambiemos y es ahora el compadre quien devuelve el favor a ella metiéndole la lengua en su vagina.
    
    Ella se levanta después de un rato y nos invita al cuarto y en cuanto llegamos me pide que me siente en una orilla de la cama que quiere que la vea como se coge al compadre y dicho esto ella se pone de perrito sobre la cama y diciendo al compadre que se la meta, que quiere que se la coja y que lo haga fuerte como si se tratara de una puta. Este se la metió de un solo golpe y empezaron a coger como poseídos, duro, fuerte, y ella pidiéndole más, más fuerte y de repente suenan dos nalgadas que él le dio, ella diciéndole “siii mas mas hazme lo que quieras soy la puta que siempre quisiste tener, hazme tuyaaa”.
    
    Cambiaron a muchas posiciones, hasta que él se corrió dentro de ella. Cansados los dos el compadre dice que es hora de irse y en cuanto se incorpora mi esposa salta como resorte sin importarle que de su panocha escurran los jugos de ...
    ... ellos, se pone de rodillas y le deja la verga semi erecta bien limpia. Yo me quedé sentado en la cama viendo como mi esposa y mi compadre se alejaban, ella en cuanto bajan se pone el blusón él se recompone sus ropas y dirigiéndose a la puerta, y yo me acerqué a la ventana para ver que sucedía, mientras se encaminaban hacia su vehículo.
    
    Maricruz le decía que cuando quisiera sacarse el estrés ella estaría disponible siempre para él, no le importó que alguien o alguno de los vecinos la vieran con el sol de la mañana y lo transparente de su blusón se podía ver tanto sus pechos como su abultada vagina. Ella se despide de él con un beso apasionado en la boca y tomándolo del cuello, y este a su vez le metía las manos por debajo para tocar sus nalgas, durarían unos 5 minutos en despedirse para cuando el sube y se aleja.
    
    En cuanto ella llega al cuarto de nosotros yo estoy desnudo con mi pene en la mano y ella al llegar se deja caer sobre el para moverse como poseída, y agradeciéndome que le haya permitido cogerse al compadre y que espera que pronto se pueda repetir otro desayuno igual...
    
    Como siempre espero que el relato haya sido de su agrado y les enviamos un cordial saludo. 
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