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La directiva
Fecha: 08/04/2022, Categorías: Hetero Autor: Hansberville, Fuente: CuentoRelatos
... Disfrútalo. -Y mirando a Fabio que ocupaba un segundo plano le guiñó un ojo a Susana -lo dicho disfrútalo. -Gracias. Rafa. -Se despidió ella sonriendo. -Estás espectacular -le dijo el hombre antes de volver a perderse entre los chinos. Efectivamente, Susana era un espectáculo. Llevaba un traje negro ajustado, palabra de honor que permitian admirar su espectacular cuerpo. Sus hombros redondeados y suaves al aire eran objeto de comentarios y sus pechos eran imán para los ojos de la mayoría. A lo largo de toda la cena las miradas de Fabio y Susana se cruzaron y no se podía disimular la tensión sexual entre ambos. Más de una vez Susana pilló a Fabio colgado de sus pechos. A lo que él contestaba con su bonita sonrisa. Susana se sentía deseada por el gigoló y comenzaba a excitarse. Notaba como su sexo ardía y apretaba los muslos uno contra otro. Poco a poco empezó a sentir cierta impaciencia por salir de allí con Fabio. Tras la cena Susana se apresuró a disculparse y despedirse de casi todos. Mientras rozaba su culo contra la entrepierna del profesional quién respondía con disimuladas caricias a sus glúteos. Después de la última despedida miró a Fabio a los ojos y con cierta lascivia le dijo: -¡Vámonos ya! -se sentía muy mojada y con unas ganas tremendas de hacerlo. Salieron a gran velocidad del parking del hotel haciendo chirriar las ruedas del pequeño AUDI. Fabio se colocó de medio lado y agarró el tirador del techo con la mano derecha mientras miraba con ...
... ojos de deseo. Susana hizo un par de giros rápidos callejeando hasta que entró en la calle Marina dirección a la Plaza Monumental. Justo enfrente un semáforo en rojo sirvió para que él le tocase el muslo. Ella suspiró y le miró mordiéndose el labio. También le tocó la pierna, la tenía dura como una piedra. Salieron del semáforo segundos antes de cambiar a verde. No volvieron a parar en ningún otro hasta llegar al edificio. La calentura de la mujer era visible en su cara. El hombre la miraba con media sonrisa sabiendo que en poco tiempo la tendría a su merced. Dentro del edificio salieron del coche y entraron en el ascensor. Estaban frente a frente, mirándose a los ojos. Durante el recorrido por las catorce plantas se miraron con deseo lo que fue aumentando la tensión entre ellos. Llegaron junto a la puerta del piso 14-A. Susana abrió. Dejó que Fabio entrase primero. Lo hizo con paso lento pero firme mientras se quitaba la chaqueta. Ella entró tras él y cerró con un portazo. Fabio giró sobre sus pies abriendo los brazos, como preguntado a que se debía tanta prisa. Susana no se lo pensó dos veces y se abalanzó sobre él metiéndole la lengua hasta la campanilla mientras le agarraba la nuca. Fabio la agarró por la cintura y la atrajo hacia él al tiempo que la correspondía a su lengua. Dejaron la unión de sus labios y comenzaron a desnudarse. Él con bastante habilidad encontró y bajó la cremallera trasera del vestido dejándolo caer al suelo. Susana quedó tan solo con la ropa ...