-
Scarlett, una pelirroja de ensueños
Fecha: 21/04/2022, Categorías: Infidelidad Autor: Tonyzena67, Fuente: CuentoRelatos
... que te tienes y cómo las has hecho gozar. - ¿Quiénes son quienes? - Tony, las mujeres somos tan igual que los hombres. A veces pienso que somos peores. Contéstame… ¿coge rico Diana? - Ya te dije… solamente somos amigos. - Mira, te voy a proponer algo… acordamos que solo sería un masaje y en solo eso se va a quedar si no me cuentas cómo coge Diana. - No te podría contar nada, pues nunca ha pasado nada. Y decir una mentira para que me des lo que yo quiero… realmente no quiero afectar a una persona. - ¡Esta bien! Dejémoslo ahí… dime, ¿qué edad tenías cuando te desvirgaste? - Catorce. -le contesté. - ¿Con la famosa Manuela o con alguna amiguita? - Sabes, nunca me ha gustado masturbarme y debí ser muy inocente cuando tuve mi primera experiencia sexual. Su nombre era Sonia y tenía casi los 18 años. - ¡Se aprovechó del niñito! ¿Estuvo rico? - ¡No lo podría negar! Absolutamente estuvo delicioso. - ¿Lo hicieron más de una vez? - ¡Si! Varias veces. Toda aquella conversación se daba mientras masajeaba sus glúteos y piernas, pues me había puesto a la inversa, pues Scarlett quería sentir mis nalgas por sobre su espalda y que mis testículos y falo le rozara su piel. Entre la conversación no dejaba de gemir, pues ahora ya con más confianza y hablando de todo aquello, pues ambos estábamos excitados que ahora le abría sus exquisitas nalgas a placer y cuidadosamente le frotaba el ano con mi dedo pulgar. Ella volvió al número de mujeres. - ¿Con ...
... cuantas mujeres te has acostado Tony? Imagino deben ser varias… me imagino. - No te equivoques… a la gente le gusta hacer rumores. No he tenido la suerte que algunos imaginan. - No creo que sea suerte… eres un hombre muy guapo y realmente me sorprende lo joven que te ves para tus 49 años. - ¿Has estado con alguien mucho mayor que tú? - ¡Nunca! - ¿Por qué yo? ¿Por qué Tony? - ¡Te gusta que te lo repita! ¿Verdad? Ya te lo dije… eres un hombre muy guapo y sensual. Para este punto de la conversación mis dedos masajeaban su conchita y concentraba dos de ellos en estimular su clítoris. Podía sentir el calor de su vagina y su humedad y Scarlett solo gemía del placer y sus microscópicos vellos rojizos se erizaban constantemente por la estimulación. Ella volvía a sus preguntas mientras se escuchaba el silencio en ese chasquido de su panocha lubricada. Su espalda ahora tenía otro aceite, esa segregar constante de mis testículos ardientes le dejaba empapada su espalda baja. - Tony, ¿alguna vez fantaseaste conmigo? - Si… desde la primera vez que te vi comencé a fantasear contigo. Incluso, cuando me llamaste, comencé a fantasear con todo esto. - ¿Y qué fantaseabas? Sabes… si me lo cuantas todo, espero lo hagamos realidad. - ¿Estas segura? - Tan segura que siento que me vas a hacer acabar muy pronto. No sabía cuánto tiempo había pasado, pues desde que me desvestí me quité mi reloj. Llevaba ya varios minutos masajeando su conchita y más que todo tocando ...