Camila: la calentura puede más que la razón (2/?)
Fecha: 12/07/2022,
Categorías:
Hetero
Autor: Yesska, Fuente: CuentoRelatos
... será mejor para ambos. Eso sí, te aviso que tengo varias copias del video en mi computadora, listas para compartirse. De manera que, o aflojas, o te quemo, ¿cómo la ves?
Tras pensarlo unos instantes, la joven resolvió que no quería que su familia, ni círculo social, se enterara de lo que hacía a solas. Por tanto, pasó una de sus manitas hacía su espalda y se topa con el jeans del friki, y tras bajarle el cierre y buscar en su bóxer, se topó con la verga semierecta, la cual comenzó a masajear, y honestamente se sorprendió por el grosor y tamaño que fue tomando, luego de sus delicadas caricias, sin duda era un instrumento nada despreciable, y consecuentemente su caliente naturaleza afloró.
Ya más desinhibida, pasó su suave mano por el tronco de esa reata hasta llegar a la rosada cabeza, que ya estaba bien pelada y reluciente por el hacer de la joven, situación que hizo gemir al otaku, y cómo no, si Camila es una verdadera profesional en consentir un palo, en mayor medida porque en verdad disfruta hacerlo. Pasaban los segundos y ella seguía jaloneando aquella reata, pasando sus deditos desde los huevos hasta la punta, y Manuel pensaba que era tal cual lo había imaginado, o probablemente mejor.
Tras unos minutos de puñetear el pito del chico, notó cómo esa verga se puso aún más tiesa, y de repente ella sintió al ansioso joven tomar sus leggings para bajarlos, liberando las nalgotas de nuestra protagonista, hasta la mitad. Sólo las observó por unos instantes y Camila ...
... pensó que no se iba a conformar con la chaqueta y que se la iba a dejar ir hasta los huevos, o más bien eso era lo que ella deseaba en ese momento, puesto que su panocha ya estaba jugosa y lista para albergar en su interior aquel trozo de dura carne, y ya se estaba inclinando hacía el frente para recibirla.
Sin embargo, Manuel optó por otra cosa: quitó la mano de Camila y se la siguió jalando él solo, hasta que se escuchó un ahogado gemido de parte del friki, y la chica sintió que una serie de chorros de espesos mecos fueron a dar al canal que divide esos deliciosos glúteos, bañándolos en su caliente leche. Una vez terminado, ella le increpó:
Camila: ya tienes lo que querías, ahora dime, ¿borrarás los videos?
Manuel: lo pensaré. Igual y si te pasas un día por mi departamento cambie de opinión.
Camila: ¡Cabrón!
Ya cuando se retiraban, el friki no podía creer que una de sus fantasías sexuales se había cumplido de esa manera tan fácil, y pensó que debía sacarle más provecho a la actitud tan proactiva de la muchacha; en cambio, ella se limitó a subir el leggings y seguir con su camino, algo sorprendida por el acontecimiento tan surreal que había sucedido ahí, y con el semen aún escurriendo entre sus suculentas nalgas.
Escena III
El resto de la semana la suerte de nuestra bella protagonista no cambió, y se llegó el sábado. Ese día se despertó a eso de las 09:00, dado que no acude al gym esos días. Apenas se levantó y se entró a bañarse. Una ducha simple, por no ...